México D.F. Sábado 26 de julio de 2003
Tuvo la habilidad de ser un estudioso profundo
y accesible, expresa Sergio Vela
Murió Kurt Pahlen, ''memoria viviente y activa
de la música del siglo XX''
Fue un hombre demócrata siempre dispuesto a colaborar
con el arte, señala el violinista Ljerko Spiller El compositor
y musicólogo dejó una vasta e importante bibliografía
ANGEL VARGAS
El director de orquesta, compositor y musicólogo
de origen austriaco Kurt Pahlen falleció el jueves a la edad de
96 años en Suiza, donde residía desde hace poco más
un cuarto de siglo, luego de que no pudo recuperarse de la intervención
quirúrgica a la que fue sometido en mayo pasado por fractura de
fémur.
La información fue hecha pública este viernes
por la familia del artista y se difundió por medio de la agencia
de noticias Afp.
Pahlen,
quien vivió exiliado a raíz de la Segunda Guerra Mundial
en Buenos Aires, Argentina, se destacó sobre todo por su labor como
investigador y pedagogo, áreas de las cuales dejó una vasta
e importante bibliografía.
Su contacto con el ámbito musical mexicano no fue
estrecho, pero sí de manera constante, pues visitó al país
en diversas ocasiones desde los años 60, sobre todo como conferenciante,
y en la década de los 90 su presencia en el país se hizo
más frecuente a raíz de las invitaciones hechas por el entonces
director del Festival Internacional Cervantino, Sergio Vela, para participar,
también como conferenciante, en ese encuentro cultural y artístico.
En 1997 se le rindió un homenaje en dicho festival
con motivo de su cumpleaños 90 en el que, tras varios años
de inactividad como director de orquesta, volvió a tomar la batuta
y estuvo al frente de la Orquesta de la Universidad de Guanajuato, con
un programa schubertiano.
Todo un caballero
El nonagenario violinista y también pedagogo de
origen croata Ljerko Spiller, quien se encuentra de visita en México
y era amigo y colaborador ocasional de Pahlen, lo recuerda como un hombre
de profunda cultura, y describe su proceder, tanto en lo profesional como
en lo humano, como el de todo un caballero.
''Era un amabilísimo vienés", señala.
''Se trataba de un hombre demócrata y siempre estaba dispuesto a
colaborar donde podía, especialmente en lo concerniente a los aspectos
culturales y artísticos".
Spiller subraya el trabajo musicológico realizado
por su colega, y destaca sus obras sobre la historia de la música,
el teatro y la ópera.
''Era un hombre muy conocido en Alemania y Austria, inclusive
desde muy joven, cuando debió emigrar a Argentina, donde dirigió
orquestas, ofreció cursos de música y cultura en general,
dictó conferencias y formó algunas agrupaciones, entre ellas
un coro del club Gimnasia-esgrima."
Musicólogo profundo y accesible
De acuerdo con el compositor y director escénico
mexicano Segio Vela, quien además de asumirse como alumno de Pahlen
sostuvo con él una estrecha amistad en años recientes, el
músico e investigador representa una memoria viviente y activa de
la música del siglo XX.
''Por la mera circunstancia de su longevidad fue un hombre
que estuvo muy activo en el quehacer musical durante todo el siglo pasado,
vigor que mantuvo hasta el final de su vida. No sólo fue un extraordinario
musicólogo, divulgador, autor de decenas de libros importantes,
sino que tuvo la enorme habilidad de ser profundo y al mismo tiempo accesible.
Es decir, el suyo no es un trabajo musicológico exclusivo para especialistas,
sino también pueden acudir a él las personas no avezadas
en el tema", explica Vela.
''Deja una huella notable para efectos del conocimiento
de la música, mediante sus enciclopedias de la ópera, de
instrumentos, de álbumes de canciones infantiles de todo el mundo,
métodos pedagógicos y, además, su enorme labor de
divulgación fruto de sus vivencias y también de su herencia
cultural austriaca, pues era habitual que a la casa de sus padres acudieran
Strauss, Mahler, Freud. De alguna manera, Pahlen fue portavoz de la riqueza
de la Viena de finales del siglo XIX e inicios del XX."
Kurt Pahlen nació en la capital austriaca el 26
de mayo de 1907. Comenzó su carrera en la Opera de Viena, antes
de huir de su patria tras su anexión por el Tercer Reich alemán
y exiliarse en Argentina.
En Buenos Aires dirigió la Filarmónica Metropolitana
y fue nombrado titular del famoso Teatro Colón, la ópera
de esa ciudad, en 1957.
Regresó a Europa en los años 70 y adquirió
la nacionalidad suiza en 1982. Además, escribió numerosas
obras sobre música clásica y, como compositor, su catálogo
registra más de 60 partituras.
Entre sus reconocimientos figuran el doctorado honoris
causa de varias universidad y la orden al mérito austriaco,
otorgado en mayo de 2002. Las últimas décadas de su existencia
las dedicó también a trabajar en la enseñanza musical
infantil.
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