El monto sobrepasa por mucho el presupuesto de varios programas de gobierno

Partidos extintos gastaron $38 millones

Los institutos que desaparecieron seguirán recibiendo dinero todo el año: consejero

RAUL LLANOS SAMANIEGO

Los cinco partidos políticos que desaparecieron después de la elección del domingo pasado absorbieron recursos por más de 38 millones de pesos, dinero que hubiera sido más que suficiente para rehabilitar todas las unidades médicas de esta ciudad o equipar los planteles de nivel prescolar y financiar por siete años el Programa de Investigación Científica y Desarrollo Tecnológico del Distrito Federal, suma equivalente a tres años de presupuesto para la Comisión de Asuntos Agrarios local.

De acuerdo con las cifras oficiales del Instituto Federal Electoral, los partidos Alianza Social, de la Sociedad Nacionalista, Liberal Mexicano, Fuerza Ciudadana y México Posible no alcanzaron el 2 por ciento de votación mínima exigida por ley para mantener su registro, por lo que desaparecerán después de estos comicios.

Para este año, el Instituto Electoral del Distrito Federal le otorgó a cada uno de estos cinco institutos políticos un presupuesto de 7 millones 637 mil 854 pesos con 30 centavos que, dividido en dos partes, se destinó a actividades ordinarias y campañas. Es decir, en conjunto, a esos partidos se les asignaron prerrogativas por un monto de 38 millones 189 mil 271 pesos.

Si estos recursos se hubieran utilizado en beneficio de los ciudadanos se hubiera podido aplicar para rehabilitar todas las unidades médicas de las 16 delegaciones políticas, rubro en el cual el gobierno de la ciudad asignó para este año 26 millones de pesos. De igual manera, para el equipamiento de los Cendis y planteles de nivel prescolar, las autoridades presupuestaron 30 millones de pesos, es decir, también se hubiera podido financiar este capítulo con el monto que gastaron esos cinco partidos en sus campañas.

El Gobierno del Distrito Federal tiene previsto asignar apenas 5 millones 490 mil pesos para la investigación científica y el desarrollo tecnológico en la ciudad, o sea que si en lugar de orientarlo al rubro de prerrogativas se hubiera asignado a este programa, se podría estar manteniendo por lo menos siete años este objetivo de gobierno.

De acuerdo con el presupuesto de egresos del DF para 2003, la Comisión de Asuntos Agrarios tiene asignado 10 millones de pesos, y el Instituto de Promoción Turística del DF, cerca de 10 millones, que junto con el Fondo de Desarrollo Económico -que tiene 11 millones 680 mil pesos- apenas suman 31.7 millones frente a los 38 que se dispuso para los partidos hoy extintos.

Las prerrogativas para esos cinco institutos políticos quintuplican el presupuesto de este año para la promoción y fomento industrial en el DF, y son más de 10 veces los recursos que se asignaron al Fomento de la Producción Forestal en esta ciudad, que fue de 3 millones 500 mil pesos. Además, es poco menos del monto total que se entregará a la Secretaría de Turismo para estos 12 meses, que suma 41 millones 368 mil pesos.

Se privatizan recursos públicos: Huchim

El consejero electoral Eduardo Huchim precisó que hay un vacío legal en el contexto electoral que impide recuperar los bienes muebles e inmuebles que sean adquiridos con las prerrogativas de los partidos, e incluso es difícil fincar responsabilidades, si es que hubo mal manejo de ese dinero, pues al extinguirse los partidos termina también su personalidad jurídica.

Con esta situación, todos los bienes que hayan comprado esos cinco partidos quedarán bajo su dominio, es decir "privatizan" esos recursos públicos, expresó el consejero electoral, quien consideró que es necesario modificar esta situación, de manera que sea posible regresar a las autoridades locales lo que se haya comprado con las prerrogativas.

Más adelante expresó que en lo que resta de este año, a esos cinco partidos mencionados se les seguirá entregando ministraciones mensuales, con el objetivo de que en su proceso de extinción puedan saldar las deudas que quedaron pendientes de estos comicios, y al mismo tiempo liquidar a los empleados que hayan contratado.