El mítico Obelisco, uno de los epicentros de la violencia y el vandalismo

Dos heridos y más de 150 detenidos en festejos por el triunfo de Boca

La policía tuvo que intervenir con gases lacrimógenos y balas de goma en algunos casos

Un adolescente fue apuñalado en Paraná Varias patrullas, dañadas en Buenos Aires

AGENCIAS

Buenos Aires, 3 de julio. Más de 150 personas detenidas y dos heridos de gravedad, fue el saldo de los incidentes que se produjeron en diversas ciudades argentinas en el marco de los festejos de los hinchas de Boca Juniors por la obtención de la Copa Libertadores.

Cuando finalizó el partido contra el Santos, miles de fanáticos de Boca desataron su algarabía por el título conseguido por su equipo, en diversos puntos del país, provocando graves hechos de violencia.

La ciudad de Mar del Plata y el mítico Obelisco en el centro de la capital argentina fueron los epicentros de la violencia y el vandalismo.

Un grupo de jóvenes violó la entrada del monumento, que es hueco, y lo convirtió en una chimenea al incendiar papeles en su interior, dado que sólo tiene una abertura en la punta. Pero la situación finalmente provocó la caída de Danielo Ramallo, de 26 años. Ramallo se encuentra internado en un hospital porteño en calidad de detenido, ya que la policía determinó que había hecho destrozos en el Obelisco.

A Ramallo se le inició una causa judicial porque junto a otros hinchas incendió parte del Obelisco, que es "patrimonio histórico nacional".

Durante los incidentes en la capital federal también quedaron dañadas varias patrullas por las piedras que arrojaron los simpatizantes de Boca.

En tanto, en la ciudad de Paraná, en la provincia de Entre Ríos, un joven de 23 años, Ricardo Caminos, fue apuñalado mientras daba rienda suelta a su alegría junto a otros hinchas.

En total, más de 150 personas fueron detenidas en los diferentes festejos que los hinchas xeneizes protagonizaron en Mar del Plata, Paraná, Rosario, Mendoza y Buenos Aires, entre otros puntos.

Los hinchas boquenses provocaron desmanes, rotura de vidrios y graves incidentes en la madrugada de hoy. En algunos casos debieron intervenir efectivos policiales, con gases lacrimógenos y balas de goma.

Incluso el jugador de Boca Carlos Tévez debió correr tras un ladrón que le arrebató la gorra, en la entrada del hotel donde estaba alojado el plantel xeneize, tras su regreso de Brasil.

Los mexicanos, irregulares

Un desempeño disparejo tuvieron los equipos mexicanos, habituales animadores en las últimas ediciones. Cruz Azul, equipo que sufrió conflictos en medio de la competencia que incluyó la "limpieza" de su plantel, se quedó fuera ante el Santos, en cuartos de final.

Por su parte, los Pumas de la UNAM perdieron en octavos ante Cobreloa de Chile.