Descarta que las fallas afecten la confiabilidad del padrón vehicular

Continúa el análisis de deficiencias en el remplacamiento: contralora del DF

Algunos puntos coinciden con irregularidades señaladas por la CMH, reconoce Luján

LAURA GOMEZ FLORES

La Contraloría General del DF informó que se detectaron diversas "deficiencias" en el programa de remplacamiento, que "no ponen en duda" la confiabilidad del padrón vehicular de la ciudad, pero coinciden, en algunos aspectos, con el informe de la Contaduría Mayor de Hacienda (CMH) de la Asamblea Legislativa, donde se destaca la impresión de 14 mil placas con códigos de barras duplicados, la "pérdida" de un millón de paquetes y el saqueo de equipos.

La contralora Bertha Luján explicó que "todavía estamos recibiendo de la Secretaría de Transporte y Vialidad" la fundamentación de las observaciones realizadas en su momento, "pero algunos puntos señalados por la Contaduría son muy coincidentes".

Entrevistada al término de una reunión privada en la sede del gobierno capitalino, precisó que continúa la revisión de la documentación del programa, iniciado en 2001, para "determinar si procede o no llevar a la legalidad (sic) algunos de los asuntos dictaminados, mediante la recomendación u observación respectiva. Los tiempos no están definidos, pueden ser dos o tres meses, pero sin llegar a archivar" los casos, dijo.

Lo anterior, aclaró, no significa que se ponga en duda el programa, sino que se busca "ver si hubo eficacia y eficiencia en el manejo del mismo y lograr la simplificación de trámites en beneficio de la ciudadanía, aunque se investigarán todos los puntos no aclarados, como el baile de cifras, de que si costó 260 millones de pesos, y dónde quedaron los 240 millones restantes".

Por su parte, el secretario de Transporte, Francisco Garduño, explicó que se adquirieron tres millones de juegos de placas y calcomanías, con un costo de 250 millones 987 mil 500 pesos más IVA, de la empresa Corporación Mexicana de Impresión (Comisa), que ganó la licitación, de las cuales 2 millones 56 mil 521 fueron para el programa de remplacamiento. El resto se usará para altas de vehículos nuevos, reposición y emplacamiento de transporte de carga.

En el inicio del programa, expuso, se estimaba en tres millones de unidades el parque vehicular, pero el número fue menor, por lo que "nos quedó un remanente, a utilizarse en los rubros antes mencionados. Así que no están perdidos los 79 millones de pesos de que habla la Contaduría; al contrario, nos evitará una nueva licitación, con la consecuente erogación de una cantidad mayor a la desembolsada".

Reconoció, sin embargo, que se imprimieron 14 mil 606 juegos de láminas con códigos de barras iguales, con un costo de un millón 221 mil 937 pesos, "por errores de dedo" o la intención de conductores de pasar dos veces el mismo vehículo, lo que fue rechazado por el sistema.

Esto, agregó, "habla de la seguridad del mismo, pese a su bajo costo y las críticas vertidas durante su implementación".

Sobre el supuesto saqueo de más de 350 equipos que fueron utilizados para diseñar el nuevo padrón vehicular -con un valor de 2 millones 800 mil pesos-, afirmó que tampoco tiene sustento, pero en su momento esto se aclarará ante la Contaduría Mayor de Hacienda de la Asamblea Legislativa, aunque "estas supuestas anomalías se suscitaron hace dos años, cuando estaban al frente del programa Alejandro Ordorica, Luis Briones y Raymundo Artiz, pero nosotros responderemos a cada una de las acusaciones".

Garduño sostuvo que los resultados de la auditoría que inició a instancias de la Setravi la Contraloría General, aclararán que "esta administración ha actuado conforme a la ley y ha concluido en forma el programa de remplacamiento, pero si se determina que algún funcionario actuó con dolo", se procederá en consecuencia.