La medida, porque persisten altos índices delictivos

Limpia en coordinación de seguridad Cuauhtémoc 8

ANGEL BOLAÑOS Y MIRNA SERVIN

En colonias como la Obrera, Buenos Aires, Paulino Navarro y Doctores -donde se encuentra la sede central de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal-, los índices delictivos no han registrado descenso, principalmente el robo a transeúnte con violencia, admitió ayer el procurador capitalino, Bernardo Bátiz Vázquez.

Por tal motivo, en reunión del gabinete de gobierno y seguridad pública se resolvió cambiar a todo el personal, incluidos mandos altos y medios, en la coordinación territorial de seguridad pública y procuración de justicia Cuauhtémoc 8, que tiene jurisdicción sobre dichas colonias.

De acuerdo con estadísticas de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), los delitos por los cuales se remitió a más personas ante el Ministerio Público en junio son asalto a peatón, robo a negocio, posesión de drogas, robo de autopartes y de vehículo.

Sin embargo, no todas las remisiones hechas por elementos de la policía preventiva concluyen en consignación, salvo en los casos de robo agravado que, desde la reciente reforma al Código Civil, se castiga con cárcel sin derecho a fianza, sin importar el monto del hurto.

El número de remisiones reportadas por la SSP asciende a 2 mil 642, por distintos delitos, y "la meta esperada al término del año" es de 18 mil remisiones.

Otros delitos con alta frecuencia de remisiones son robo a casa habitación, portación de arma de fuego, violación, secuestro y asalto a microbús.

El ilícito por el que menos remisiones se hacen es robo en el Metro: sólo se han reportado cinco casos desde el 16 de mayo.

Por su parte, el procurador explicó que la determinación de renovar el personal de dicha coordinación es para "hacer un esfuerzo, con nuevas personas totalmente distintas a las que estaban manejando la coordinación. Se cambia al responsable de agencia del Ministerio Público, al comandante de Policía Judicial, al jefe de sector, y vamos a empezar el trabajo con un equipo nuevo, fresco, que empiece a analizar la zona, que haga un estudio, una relación de las bandas que allí operan para comenzar a desarticularlas".

Los cambios, agregó el procurador, se implementaron aun cuando se estaba realizando ya un trabajo muy intenso en la zona mediante el cumplimiento de órdenes de aprehensión, recorridos en vecindades donde se vende droga, incluso con reuniones especiales en las que él mismo participó, por lo que consideró que los avances que logre el nuevo equipo serán también resultado de dichas acciones.