Cuestiona Martínez Veloz la operación de productoras extranjeras de electricidad

Generan plantas daños económico y ambiental

ROBERTO GARDUÑO

La operación de plantas extranjeras productoras de electricidad en México acarreará cuantiosas pérdidas económicas al erario nacional y deteriorará gravemente el medio ambiente de Tijuana, Mexicali y Rosarito, denunció el diputado federal Jaime Martínez Veloz.

El proyecto de las trasnacionales Marathon Oil, El Paso Energy, Piscis Petroleum, Sempra, Shell y Chevron es instalar 20 plantas productoras en Baja California para abastecer el sur de Estados Unidos. A la fecha el gobierno aprobó seis concesiones con capacidad de producir 2 mil 600 megavatios (MW), el doble de lo requerido para iluminar las poblaciones del noroeste de México, cuya utilidad anual se calcula en 600 millones de dólares.

El perredista explicó que cinco plantas son de las conocidas como "de ciclo combinado", que requieren gas, y una de ingeniería eólica. Su capacidad de producción es superior a la de Cerro Prieto y a la de la termoeléctrica Benito Juárez.

"Las nuevas instalaciones necesitan gas y las trasnacionales están tratando de instalar estaciones de gas licuado entre Tijuana, Rosarito y Ensenada para que el destino del hidrocarburo sea el mercado del sur de Estados Unidos. Esto convertiría a la entidad en el cuarto de atrás. Estos negocios dejarían una utilidad neta de 600 millones de dólares anuales si se pone el precio más bajo de venta del kilovatio hora en México", expuso.

Las seis trasnacionales citadas son las generadoras de la crisis energética en California, Estados Unidos, porque simularon falta de abastecimiento y practicaron medidas que tuvieron como destino el incremento del costo del servicio.

A eso se añade otro hecho. Hace unas semanas la magistrada Irma González, de San Diego, declaró ilegales las plantas instaladas en Mexicali, al considerar que las autoridades de Estados Unidos no evaluaron el daño ecológico en los lugares aledaños a ellas. "Según reportes obtenidos en aquel país, estas plantas forman parte de un proyecto más amplio de 20 que pretenden instalarse, y cada una de ellas generará un promedio de 2 mil toneladas anuales de contaminantes."

Además del perjuicio a la ecología mexicana, los propietarios de las plantas pretenden vender al país la energía producida en Baja California bajo un proceso de exportación-importación acorde a los intereses de las trasnacionales, apunta.

-Ante esas evidencias, Ƒqué acciones ha tomado el gobierno mexicano?

-Hay que revisar si esta omisión presidencial no corresponde a compromisos con las trasnacionales. Los estadunidenses tratan de acusar a México de que tiene mal manejo de su sector energético. Fox tiene que explicar de qué se trata. ƑPor qué no lo quiere hacer? Si no lo hace, se alimenta la sospecha de que fue apoyado por esas corporaciones.

Martínez Veloz reveló que ya existen permisos para importar energía eléctrica: E/212/importación/02, otorgado a Energía de Baja California, con capacidad de 320 MW, y E/195/importación/01, a Termoeléctrica de Mexicali, 120 MW. Los avales de exportación son: E/214/ exportación 002 a Fuerza Eólica de Baja California, con 300 MW; E/202/exportación 01, a AES Rosarito, con 556 MW; E/200) exportación 01, a Energía de Baja California, con 320 MW; E/1997/ exportación 01 para Termoeléctrica de Mexicali, con 679 MW; E/182/ exportación 00, otorgado a Energía Azteca, con 582 MW, y E/163/ exportación 00, entregado a Energía de Mexicali, con capacidad de 257 megavatios.