El Tribunal Federal de Conciliación y Arbitraje ordena también reponer cuotas retenidas

Ratifican a Areli Hernández Rodarte como dirigente del sindicato del INEGI

Queremos sentar las bases de una democracia sólida en nuestro gremio, dice la lideresa

FABIOLA MARTINEZ

El Tribunal Federal de Conciliación y Arbitraje (TFCA) ratificó a Areli Hernández Rodarte como dirigente del sindicato de trabajadores del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI), y ordenó a la dirección de ese organismo reponer las cuotas retenidas desde noviembre pasado.

En un hecho sin precedentes, el TFCA ratificó la toma de nota (reconocimiento oficial) a un grupo democrático que había mostrado autonomía respecto del líder de la Federación de Sindicatos de Trabajadores al Servicio del Estado (FSTSE), Joel Ayala Almeida.

De acuerdo con documentos firmados por la secretaria general de acuerdos del TFCA, Patricia Morales Pinto, ese tribunal hace valer que la toma de nota del comité ejecutivo nacional del Sindicato Nacional de Trabajadores del INEGI "es vigente" y concluirá el 7 de julio de 2004.

Por ello, la funcionaria comunica lo anterior a los directivos del instituto para que se reconozca la representación de Hernández como secretaria general "y (se haga) entrega de las cuotas sindicales", en cumplimiento de la resolución unánime del pleno del TFCA, que preside Alfredo Farid Barquet.

Al respecto, Hernández Rodarte comentó que el primer paso tras la resolución del TFCA será enviar los documentos correspondientes a la dirección del INEGI para que se reanude el trato bilateral y se negocien los asuntos que reclaman sus representados.

El sindicato del INEGI tiene apenas 10 años de existencia, por lo que queremos -dijo- sentar las bases de una democracia sólida para crecer como organismo de trabajadores, difundir nuestros estatutos y hacer valer la legalidad de nuestro gremio.

La resolución del TFCA llega seis meses después del inicio del conflicto, "cuando Gilda Martínez y un pequeño grupo de trabajadores intentaron imponerse como representación sindical sin el voto de los agremiados, acción financiada por el coordinador administrativo del INEGI, Lino Arturo Vera Pérez, y el director jurídico del mismo, José Manuel Contreras Botti", agregó.

Luego el asunto llegó a la mesa del tribunal sobre trabajadores al servicio del Estado, aunque en el proceso el grupo democrático fue despojado de sus oficinas sindicales por petición de Gilda Martínez, aunque dos meses después se desistió de sus acciones y demandas ante el TFCA.

El INEGI tiene una plantilla de 19 mil trabajadores en todo el país, de los cuales sólo mil 500 son sindicalizados de base, 5 mil 500 de confianza y el resto eventuales.

La pugna se originó en julio de 2001, cuando al tomar posesión de su cargo, Hernández Rodarte advirtió que haría "una limpia" en el sindicato y ordenó a 70 agremiados de comisión en la FSTSE, que retornaran a su adscripción.

En seguida se inició también el conflicto con las autoridades del instituto, al grado de que no se logró mantener una mesa de negociación, toda vez que Hernández Rodarte exigía aumento salarial, revisión del catálogo de puestos y otorgar plaza definitiva a 12 mil trabajadores eventuales que laboraban en esta condición desde hace más de 15 años.