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México D.F. Viernes 30 de mayo de 2003
CIUDAD PERDIDA
Miguel Angel Velázquez
Luege y su mediático coro condenatorio
EN EL mundo al revés la realidad se disfraza
de verdad mediática y de pronto se convierte en escándalo.
ALGO POR el estilo pudo pasar ayer después
de que se supo del fallecimiento del trabajador del distribuidor vial San
Antonio. De pronto, sin más, como si fuera asesino, se quería
condenar al jefe de Gobierno, a quien se le cargaba la consecuencia del
accidente en la obra.
LA CONDENA tuvo como argumento las "prisas" del
gobernante del Distrito Federal para concluir la obra que se inauguraría
el 1O de junio, y bajo esa premisa se buscó de todas
formas hacer coincidir la opinión de los auditorios.
CASI DE inmediato, con reflejos felinos, el jefe
del panismo en la ciudad, José Luis Luege, saltó y propuso
a los deudos del desafortunado trabajador brindarles la asesoría
legal necesaria para que demandaran al titular del Ejecutivo local.
POR FIN se abría un resquicio por donde
colar la "verdad mediática" que cuestionara el trabajo del gobierno
de Andrés Manuel López Obrador. Era como un festín
de lobos y el accidente se convertía en crimen.
ENTONCES LA gente tomó el teléfono
y contradijo buena parte de lo que había escuchado. No estaba de
acuerdo, aunque una y otra vez se le repetía que eran las prisas
del gobierno las que causaron el accidente.
Y ES que aún sin tenerlo en conciencia o
con los datos en la mano, la gente supo establecer que los accidentes son
eso, imponderables que suceden muchas veces a pesar de todas las medidas
de seguridad y las prevenciones que se establezcan con o sin la más
alta tecnología.
PERO VEAMOS qué pasa en materia de accidentes
de trabajo. El Instituto Mexicano del Seguro Social registró en
todo el país un promedio de 300 mil accidentes de este tipo al año,
de los cuales más de 59 mil suceden en esta capital.
ES DECIR, en la ciudad de México se accidentan
poco más de 164 trabajadores al día, casi 5 mil por mes,
en promedio, y muchos de los percances tienen resultados funestos para
los trabajadores.
ASI LAS cosas, en el Distrito Federal fallecieron
durante el año pasado 138 personas a causa no de las prisas de los
patrones, sino de esos accidentes que no pudieron ser prevenidos por los
sistemas de seguridad de las empresas.
PERO AHI no para la cosa: en la categoría
de accidentes laborales que registra el IMSS, durante 2002 más de
13 mil trabajadores de todos los ramos fueron incapacitados permanentemente.
NO SE trata de evadir o esquivar las responsabilidades
que cada cual pueda tener en el asunto, pero en el juego político,
donde muchos intereses tienen miedo por la aceptación popular del
jefe de Gobierno, el coro condenatorio se levanta de pronto vacío
de memoria y lejos del contexto que permita la reflexión.
POR LO pronto, lo que sí podrían
hacer los 59 mil accidentados en esta capital es tomarle la palabra a José
Luis Luege y llegar a la sede del PAN en esta ciudad a pedirle asesoría
legal gratuita en contra de todas y cada una de las empresas y los empresarios
que, según las cuentas del panista, podrían tener responsabilidad
en esos infortunios. Adelante.
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