Hernández Juárez y Bahena apoyan paro del SUTGDF

Niega Medel que solicitó un anticipo de cuotas sindicales

Consultará Espino sobre la posibilidad de parar el Metro

BERTHA TERESA RAMIREZ, LAURA GOMEZ Y SUSANA GONZALEZ

El líder del Sindicato Unico de Trabajadores del Gobierno del Distrito Federal (SUTGDF), José Medel Ibarra, anunció que no claudicará en sus demandas ni cederá como en ocasiones anteriores, por lo que si bien no pueden cerrar instalaciones ni tomar edificios, para no incurrir en responsabilidad, hoy continuarán las marchas y concentración en el Zócalo con el apoyo moral de los empleados del Metro.

Fernando Espino, secretario general del sindicato de este gremio, advirtió por su parte que si hoy no hay ningún acuerdo con las autoridades capitalinas sobre sus demandas de incremento salarial de 20 por ciento, mejoras en prestaciones, retabulación de mil 125 trabajadores y la basificación de otros 401, consultará con las bases sobre un posible paro en el sistema.

Abundó que ante la "política antiobrerista" impulsada por la administración actual, convocó a las organizaciones que tienen relación laboral con ella a conformar un frente sindical para "evitar que la defensa de nuestros agremiados sea vista como un acto proselitista o de protagonismo político, como se ha señalado en los últimos días".

A este llamado respondieron el líder de los telefonistas y dirigente de la Unión Nacional de Trabajadores, Francisco Hernández Juárez, y de la Alianza de Tranviarios de México, Benito Bahena, quienes expresaron su apoyo al movimiento iniciado por José Medel, y señalaron que "si no nos lo pide, nosotros y nuestros trabajadores marcharemos con ellos porque está en juego la defensa de las conquistas laborales ganadas a lo largo de años".

Durante un mitin en la Plaza de la Constitución, Medel Ibarra acusó al gobierno de lanzar una campaña de desprestigio en su contra; sin embargo, dijo que los funcionarios públicos "no son tan honestos como dicen, ni nosotros somos los pillos, como nos quieren hacer aparecer".

En ese tenor, dijo que el subsecretario de Gobierno, Martí Batres, debe aclarar primero el destino de 74 millones de pesos del último año de su gestión como coordinador de la Asamblea Legislativa; más aún, López Obrador "debe especificar cuánto y de quién era el dinero con que financió la toma de pozos petroleros, ya que se sospecha que era dinero del pueblo".

En torno al anticipo de 10 millones de pesos de cuotas sindicales que solicitó a la Dirección de Relaciones Laborales del Gobierno del Distrito Federal, como consta en el oficio RCEG/085/03, que presuntamente serían para financiar su campaña por una diputación a la Asamblea Legislativa, según comentara el secretario de Gobierno, Alejandro Encinas, dijo que las autoridades mienten, pues "fueron ellas quienes nos propusieron que simuláramos un préstamo para financiar campañas de candidatos del PRD con dinero muestro".

Respecto de sus demandas laborales, dijo que mantienen sus peticiones de basificación de 35 mil trabajadores, 10 por ciento de aumento al salario y 20 por ciento en prestaciones, la no privatización de la planta de asfalto y el reconocimiento de la sección 40 del sindicato.

Las marchas

Los contingentes de las distintas delegaciones y dependencias gubernamentales siguieron las mismas rutas del lunes pasado, y aunque esta vez fue menor el número de participantes -según la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) ayer hubo 10 mil manifestantes, cuando un día antes contabilizó hasta 12 mil-, hubo casos, como el grupo de la delegación Gustavo A. Madero, en que se tardó más de media hora en recorrer seis cuadras.

Desde temprana hora las autoridades pusieron en marcha un operativo especial de vialidad y seguridad con mil policías preventivos y auxiliares para paliar los problemas de tránsito, pero con excepción del Circuito Interior, los integrantes del SUTGDF ocuparon sin problemas carriles laterales y centrales del Eje Central, calzada de Tlalpan y Paseo de la Reforma.

Negociaciones en el Metro

En la toma de nota del nuevo Sindicato Nacional de Trabajadores del Sistema de Transporte Colectivo, Fernando Espino precisó que el costo de su pliego petitorio es de 132 millones de pesos anuales, que "no resulta oneroso si pensamos que los 4.6 millones por aumento se obtienen con un solo día de venta de boletos".

Los otros 4.4 millones para mejorar el monto de vales de despensa y ayuda para renta, entre otras prestaciones, representaría otro día de venta, a los cuales se sumarían 24 millones en una sola exhibición para retabulación y ningún centavo extra para la basificación de 401 empleados, que fue aprobada en la administración pasada. Así que "no existe un argumento sólido para que nos nieguen nuestras peticiones, porque no afectamos sus finanzas".