Washington pide a Bruselas que la declare "inadmisible"

Bélgica envía a EU demanda contra Franks por crímenes de guerra

AFP

Bruselas, 20 de mayo. El gobierno belga decidió este martes enviar a las autoridades de Estados Unidos la demanda por crímenes de guerra presentada en Bruselas contra el general estadunidense Tommy Franks, comandante de las fuerzas angloestadunidenses durante la guerra en Irak, informó una fuente gubernamental.

La autoridad belga tomó esta decisión por consejo de la fiscalía federal, anunció a Afp el despacho del primer ministro Guy Verhofstadt.

La demanda contra el general Franks fue presentada la semana pasada por 17 iraquíes y dos jordanos que invocaron la ley de "competencia universal" que permite a la justicia belga proceder judicialmente contra crímenes de guerra o crímenes contra la humanidad, no importa el sitio en que hayan sido cometidos ni la nacionalidad de su autor.

Los iraquíes acusan a Franks de haber cometido crímenes de guerra durante la guerra en Irak "utilizando bombas de fragmentación en zonas habitadas por civiles".

Estados Unidos denunció de inmediato la demanda contra Franks y pidió al gobierno belga que la declare inadmisible.

El gobierno belga decidió enviar la demanda a Estados Unidos en virtud de una reciente enmienda de la ley que permite transmitir directamente estos casos a la justicia del país de origen de la persona acusada, si ésta se siente de este modo más segura de gozar de un trato equitativo.

Las autoridades belgas habían anunciado el sábado su intención de frenar el procedimiento, estimando que se trataba de un "abuso político" de la ley de competencia universal.

En marzo, una demanda presentada en Bruselas contra el ex presidente estadunidense George Bush padre y el actual secretario de Estado, Colin Powell, en relación con los bombardeos estadunidenses contra Irak durante la guerra del golfo Pérsico, en 1991, ya había provocado fuertes protestas en Estados Unidos.

De la misma manera, un diplomático belga recibió críticas de Israel tras una demanda presentada en Bruselas contra el primer ministro israelí, Ariel Sharon, por su presunta implicación en las matanzas de Sabra y Chatila en Líbano, en 1982.