Critica que el presidente se niegue a dialogar con los integrantes de la coordinadora

Vicente Fox sólo ve a quienes están al lado de Elba Esther, afirma la CNTE

KARINA AVILES

La Comisión Permanente de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) criticó ayer que el presidente Vicente Fox en vez de dar una "señal" que permitiera articular una reunión con el magisterio que sí está preocupado por la educación tome "una actitud de ni los veo ni los oigo, pretendiendo que no existimos", cuando lo que le debería preocupar es que existe un conflicto en el sector y una necesidad urgente de rescatar la enseñanza.

En respuesta a los señalamientos del jefe del Ejecutivo, de que los maestros disidentes no reflejan al magisterio comprometido con la educación y el país, destacó que dichas declaraciones sólo enturbian los posibles acercamientos que se pudieran dar con los representantes del gobierno federal. También manifestó que al "único lado que voltea a ver el Ejecutivo es al de Elba Esther Gordillo".

En voz del profesor Pedro Ramírez Vázquez, la Comisión Permanente de la CNTE indicó que así como el jefe del Ejecutivo recibe a deportistas, personas del espectáculo y a extranjeros, lo mínimo que podría hacer es recibir a los maestros que sí acuden a las aulas a cumplir con su función y con el quehacer cotidiano de la docencia.

"En vez de que Vicente Fox diera una señal que nos permitiera programar una reunión, en la que con un formato respetuoso le podamos expresar nuestras opiniones sobre la problemática de la educación, toma una actitud de ni los veo ni los oigo, pretendiendo que no existimos.

"Al único lado que voltea a ver el Ejecutivo es al de Elba Esther Gordillo y mal hace, porque al gobierno del cambio no le queda tomar este tipo de actitudes y creer que los problemas se van a acabar por inanición", indicó.

Sin embargo, agregó, "las señales que sí nos muestra son las de la Policía Federal Preventiva y las de mandarnos un dispositivo del Estado Mayor Presidencial, como si estuviéramos en estado de sitio".

Expresó que aunque sólo hubiera un maestro inconforme el Ejecutivo está obligado a escucharlo, porque la Constitución ampara el derecho de petición. El profesor, de la sección 36 del Valle de México, enfatizó que cualquier maestro es parte del magisterio "por el solo hecho de pararse en una aula, en una escuela, y de atender al alumno".

En ese sentido, precisó que los maestros que se movilizan en la capital "nunca hemos dicho que representamos a todos. Pero representamos a la mayoría de profesores preocupados porque se resuelvan los problemas de la educación en los hechos, no en los discursos, no en los anuncios, no en los programas de radio".

El Presidente no se enfrenta de "manera cotidiana como nosotros a los niños que llegan a la escuela sin estar bien alimentados. No se enfrenta a los problemas de alcoholismo, drogadicción y pandillerismo" que existen en los planteles.

En la montaña de Guerrero, recordó, hay 16 mil alumnos sin clases, "no por culpa de las manifestaciones ni de los paros, sino porque no hay maestros, porque el presupuesto no alcanza. Es ahí donde está la contradicción del gobierno federal", manifestó.