Golpe de mano del PAN evita discutir la iniciativa en la ALDF
En estampida salieron huyendo los legisladores del PAN para evitar se discutiera la iniciativa de ley de Sociedades de Convivencia, que otorgaría derechos a las parejas del mismo sexo, entre otras formas de convivencia, en la última sesión ordinaria de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, el pasado 30 de abril. Justo antes de abordar el punto, el presidente de la mesa directiva, el panista Tomás López García, se apresuró torpemente a declarar clausurada la sesión por "falta de quórum", y salió huyendo por la parte trasera del recinto, lo que provocó confusión y gritos. En ese momento sólo había 33 diputados de los 34 que se necesitan para seguir sesionando. De esta manera, por segunda ocasión, las coordinadoras del PAN, Patricia Garduño, y del PRI, María de los Ángeles Moreno, está vez apoyadas por el coordinador del PRD, Alejandro Sánchez Camacho, en acción concertada evitaron se discutiera el tema, a pesar de haberse cumplido cabalmente con todos los requisitos del proceso reglamentario. Los tres coordinadores, miembros de la junta de gobierno, se habían negado a incluir en la agenda legislativa el dictamen aprobado en comisiones de la iniciativa de Ley de Sociedades de Convivencia, lo que provocó que once diputados del PRD, Democracia Social, del PT y uno del Verde Ecologista, que apoyan la iniciativa, tomaran la tribuna durante casi dos horas para forzar su inclusión. Después de una negociación, se incluyó el punto, pero ya se había ideado la estrategia para boicotearla. Como un "golpe de mano" de Acción Nacional que violentó el orden legal de la sesión calificó el diputado perredista Armando Quintero la jugada. Por su parte, Enoé Uranga, principal promotora de la ley, afirmó que se trataba de un acto de autoritarismo y de censura contra el mismo proceso parlamentario. "El PAN es un partido que recurre a la ilegalidad para ocultar sus fobias, su conservadurismo y su profunda falta de honestidad para reconocer que no tiene argumentos válidos para defender su postura", declaró, y adelantó que recurrirá a la Suprema Corte de Justicia para meter una controversia constitucional que obligue a los diputados renuentes a discutir la iniciativa, toda vez que se ha cumplido con los requisitos reglamentarios. Para ello, informó, 23 diputados firmarán el acuerdo de controversia. Los panistas decidieron sacrificar siete iniciativas de ley y 17 puntos de la orden del día, con tal de no discutir la ley de Sociedades de Convivencia. El PAN rehuye exponer sus argumentos en contra en el pleno de la Asamblea, pero no así ante los medios. Salvador Abascal, uno de los principales opositores, declaró que su partido se oponía "para proteger a los niños" de una ley que sólo otorga mínimos derechos --de sucesión, alimentación y de tutela--, entre los y las convivientes. El único panista que permaneció en el recinto fue el diputado Hiram Escudero. Por su parte, la bancada perredista está dividida, y aunque el diputado Bernardino Ramos informó que su partido tenía una posición unitaria a favor, se sabe que los cinco diputados de la Corriente Izquierda Democrática, encabezada por Sánchez Camacho, se oponen con todo. Del lado del PRI, el diputado Edgar R. López Nájera tenía lista su propuesta de moción suspensiva, mismo recurso utilizado la vez anterior, para evitar se discutiera, aunque se esperaban algunos votos priístas a favor de la discusión. La iniciativa volverá a presentarse en el periodo extraordinario de sesiones de la ALDF, informó la diputada Enoé Uranga, quien cuenta con el apoyo de decenas de organizaciones feministas, lésbico-gay, de lucha contra el sida, de educación sexual y de intelectuales, artistas, juristas y académicos. "Los diputados y diputadas que se aliaron para evadir el tema, volverán a enfrentarlo, les guste o no les guste", advirtió. |