México D.F. Viernes 9 de mayo de 2003
Sus jefes le ordenan cancelar segundo encuentro con estudiantes de bachillerato
Se retira de Tijuana militar que instó a mexicanos a unirse al ejército de EU
JORGE ALBERTO CORNEJO CORRESPONSAL
Tijuana, BC, 8 de mayo. El sargento estadunidense Javier Castro, quien se reunió la semana anterior con dos estudiantes del Centro de Bachillerato Tecnológico y de Servicios de la delegación municipal Mesa de Otay para instarlos a ingresar al ejército de su país a cambio de una beca para cursar una carrera universitaria, recibió la orden de retirse de esta ciudad.
El militar tenía prevista una segunda charla este jueves con estudiantes residentes en Tijuana nacidos en Estados Unidos. En San Diego, California, dijo que sus superiores le ordenaron cancelar el encuentro tras el "escándalo" que provocó su visita anterior, como reportó La Jornada el sábado pasado.
La primera visita, denunciada por padres de familia de la escuela, fue criticada inclusive por el gobernador de la entidad, Eugenio Elorduy Walther, quien calificó la acción de falta de respeto a la soberanía mexicana.
"Hablamos ya de este tema con el Instituto Nacional de Migración (INM). Me parece totalmente inaceptable que representantes del gobierno estadunidense" y de sus fuerzas armadas intenten reclutar "mexicanos para las filas de su ejército; que eso lo hagan en su país".
Agregó que se pidió al INM que cumpla con mayor firmeza su misión e investigue el incidente. "Se me hace una violación flagrante, porque ni siquiera tuvieron la cortesía de pedir autorización; decimos (al gobierno estadunidense) que debe actuar con mayor respeto a México y que cesen este tipo de presencias."
Por su parte, el delegado del INM en Baja California, Francisco Javier Reynoso Nuño, señaló que no se solicitó permiso a la dependencia para ingresar a realizar la promoción entre jóvenes tijuanenses.
La delegación del INM, añadió, no tenía conocimiento de que militares de Estados Unidos se hubieran presentado en el plantel educativo citado.
El martes de la semana pasada la presencia del militar fue denunciada por padres de familia que reclamaron a las autoridades educativas estatales por permitir que se intente convencer a los estudiantes de convertirse en "carne de cañón".
Olga Patricia Romero, subdirectora estatal de Educación Media Superior y Superior, indicó que se inició una investigación para saber por qué las autoridades del plantel invitaron al militar, pues no existe convenio alguno de colaboración con el ejército de ese país.
En respuesta, Javier Castro dijo: "no es algo que hubiéramos hecho antes, sino que uno de nuestros reclutas nos informó que en esa escuela había dos jóvenes nacidos en Estados Unidos, de padres mexicanos, interesados en ingresar al ejército (de ese país); por eso los fuimos a ver".
El sargento, con base en el centro de reclutamiento militar de Imperial Beach, California, agregó que las autoridades del plantel, al enterarse de su presencia, lo invitaron a dialogar con el resto de estudiantes que por haber nacido en Estados Unidos o contar con tarjeta migratoria de residente en ese país eran "elegibles" para ingresar en el ejército de la nación vecina.
Castro indicó que él mismo cursó la preparatoria en su natal Mexicali, Baja California, y luego fue reclutado por el ejército del país vecino, donde obtuvo, tras cumplir el servicio militar, su nacionalidad estadunidense.
Explicó que a los interesados se les ofrece un pago de hasta 20 mil dólares por practicar ejercicios militares y una beca de hasta 5 mil dólares para estudios universitarios, así como facilidades para obtener la ciudadanía del vecino país.
|