La estabilización de la economía argentina, mayor a lo esperado, reconoce el FMI

Menem acusa a Kirchner de triunfalista y se empeña en seguir su campaña sucia

Comparto con Lula la idea de una sociedad más justa, dice el candidato progresista del justicialismo

STELLA CALLONI CORRESPONSAL

Buenos Aires, 8 de mayo. Mientras el ex presidente argentino Carlos Menem sigue empeñado en una campaña sucia con miras a la segunda vuelta del 18 de mayo contra su oponente Néstor Kirchner, éste se reunió por más de una hora con el gobernante de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva.

Al finalizar el encuento en el Palacio de Planalto en Brasilia, Kirchner, del Partido Justicialista (peronista) al que también pertenece el neoliberal Menem, pero que representa al ala progresista, dijo que compartía con el mandatario brasileño "la idea de una sociedad más justa, de lucha contra la exclusión social y contra la corrupción".

También "tenemos una visión de no alineamiento automático, de no relaciones carnales", dijo, en alusión a la definición que hiciera la cancillería durante el menemismo (1989-99) sobre la relación con Washington.

La audiencia programada para 40 minutos se extendió por poco más de una hora y hubo coincidencias en el tema de la urgente necesidad de profundizar la integración en el Mercado Común del Sur (Mercosur), que para ambos podría tener características similares a la Unión Europea, así como ahondar una alianza estratégica entre ambos países.

"La conversación no fue sobre quién va a ganar, sino sobre una relación institucional", declaró Kirchner -quien tiene amplia ventaja sobre Menem en todos los sondeos-, antes de viajar a Santiago, para reunirse con el presidente chileno, Ricardo Lagos.

En tanto, Menem, avizorando una derrota, trata de embarrar la cancha de mil maneras, según dicen sus adversarios, con críticas y hasta descalificaciones de su adversario, al que hoy acusó de "absurdo triunfalismo". Sin embargo, aseguró que él ganará "por demolición", pese a que los sondeos pronostican lo contrario.

Menem no pudo presentar la denuncia de fraude electoral en la primera vuelta, luego que el video televisivo que lo comprobaría mostraba en realidad maniobras de un concejal menemista, y que los observadores internacionales establecieron que la primera vuelta fue transparente.

Ahora intenta instalar la idea de que esto sucederá en la segunda vuelta, y además sembró la alerta, al hablar ante un grupo de sindicalistas adeptos, al sostener que Kirchner "no terminará su mandato".

Pero al salir del teatro donde transcurrió el encuentro, se topó con la realidad. El ex mandatario fue insultado por personas que hacían fila frente al consulado italiano, próximo al teatro. "Vendepatria, arruinaste el país y por eso me tengo que ir", gritaban algunos jóvenes.

A su vez, el nuevo Comité Ejecutivo de la Unión Industrial, encabezado por Alberto Alvarez Gaiani, felicitó al presidente Eduardo Duhalde por la transición presidencial y "por las condiciones" en las que entregará el poder a su sucesor el 25 de mayo.

Por su parte, el Fondo Monetario Internacional (FMI), que se había enfrentado a Duhalde, volvió dar nuevas señales favorables. El vocero del organismo, Thomas Dawson, señaló que la estabilización económica "es más amplia de lo esperado", aunque advirtió que quedan asuntos por resolver. Agregó que el gobierno que surja de la segunda vuelta tendrá "mayor margen de maniobra", precisamente por la estabilización de la economía.

Con todo, para Menem la guerra electoral no ha terminado. Su campaña, apoyada desde las sombras por cuadros de la pasada dictadura militar, grupos policiales, agentes de seguridad extranjeros y locales, según analistas, está dirigida a tratar de aterrorizar a la población asegurando que que si gana su oponente, el país se transformará en un sistema socialista ingobernable. Menem, quien pide poderes especiales y promete sacar el ejército a las calles, alimenta a través de medios de prensa simpatizantes la idea de que se entrará en una especie de nueva guerra fría, si gana Kirchner.

Su prédica de que Argentina será Cuba con Kirchner, es retomada por los sectores más peligrosos para la democracia que auguran que Argentina "volverá a 1973", es decir, al momento en que llegó al gobierno el fallecido Héctor Cámpora, para permitir el regreso de Juan Domingo Perón tras la proscripción de ese movimiento por sucesivas dictaduras militares.

Así, el informe de un grupo de información de sectores ligados a la pasada dictadura sostiene que "hace 30 años muchos argentinos mirábamos azorados la irrupción de la izquierda insurreccional en el seno de las grandes movilizaciones populares que siguieron al retiro del gobierno militar (...) Tres décadas después, en el verdadero volver al pasado, vemos nuevamente azorados a corrientes insurreccionales operando en el seno de los piqueteros (desocupados) y organizaciones barriales que liberan autopistas, cierran las avenidas, extorsionan a los funcionarios, quiebran toda norma de convivencia para la vida urbana y encuentran interlocución privilegiada en el actual presidente de la nación, quien hasta recomienda a sus seguidores profundizar esos vínculos".

Más aún, medios menemistas como Ambito Financiero, Infobae, Radio Diez y al menos dos emisoras de televisión, tratan de instalar temas tan increíbles como que los desocupados son entrenados por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia.

La campaña es tan abierta que los asesinatos de cinco policías en menos de dos días es atribuido por parte de la población a una maniobra de esos sectores del pasado, que por una parte limpiarían la institución de algunos agentes molestos y por la otra le envían el mensaje a la sociedad de que se necesita mano dura.

El ministro de Seguridad y Justicia de la provincia de Buenos Aires, Juan Pablo Cafiero, alertó hoy sobre la existencia de un "estado de violencia desproporcional". Ese calificativo traduciría las dudas sobre la extraña casualidad de que estos hechos sucedan en estos momentos, como ha quedado bajo sospecha la provocación que significó el violento desalojo de la fábrica Bruckman, recuperada por sus trabajadores de la quiebra hace más de año y medio, apenas unos días antes de la primera vuelta.