Festejo con albañiles en Los Pinos por el Día de la Santa Cruz

También es mi tarea motivar y derramar optimismo: Fox

Miles de campesinos y obreros se beneficiarán con los proyectos de vivienda y el Seguro Popular, dice el Presidente

JUAN MANUEL VENEGAS

Con la aclaración de que como Presidente de la República tiene también la tarea de "motivar y derramar optimismo", Vicente Fox Quesada dijo ayer que trae una "secuencia de acuerdos entre el gremio político, entre los gobiernos y junto a la sociedad". Y esos acuerdos han permitido a su administración, entre cosas, presentar en esta semana que termina los programas para el desarrollo del campo y para la reactivación económica y el empleo.

En el desayuno que este viernes ofreció en los jardines de Los Pinos a un grupo de albañiles para festejar el Día de la Santa Cruz, Fox efectivamente "derramó optimismo" y aseguró que en los próximos años, antes de que termine su sexenio, miles y miles de campesinos y obreros de todo el país se verán favorecidos por esos programas.

Consomé y barbacoa, carnitas, chicharrón, guacamole, frijoles y arroz fue el menú que el mandatario ordenó para recibir a los 60 trabajadores de la construcción -todos de una obra que por el rumbo de Azcapotzalco realiza la empresa SARE- en la zona conocida como La Hondonada, en la residencia oficial. Poco más de una hora duró el agasajo, encabezado por el Presidente, como un hecho más que demuestra "el verdadero cambio" que hay en el país, pues "antes jamás un mexicano común y corriente podía aspirar a venir y entrar a Los Pinos, y pasearse aquí".

Los trabajadores se veían sorprendidos. Daba la impresión de que no habían sido avisados de que esa mañana dejarían su trabajo para desayunar con el Presidente de México... pero a la hora de los discursos quedó claro que no fue casualidad que todos ellos fueran empleados de la empresa constructora SARE, pues resultó que ésta donó 10 viviendas para que, a través del Infonavit, igual número de albañiles -entre los presentes ahí- las adquirieran.

Eso fue pretexto para seguir "derramando" optimismo. "Por primera vez, ahora nos vamos a asegurar de que quien construye viviendas tenga acceso a ellas... las cosas no suceden de manera espontánea. Con ese trabajo (que se hace para lograr acuerdos) inicia esta prueba piloto. Hoy son 10 casas, pero les aseguro que el próximo 3 de mayo de 2004 estaremos hablando de muchas casas -¡probablemente miles!- que estarán destinadas a los trabajadores de la construcción".

Para los agricultores también habrá viviendas, ya que con el Acuerdo Nacional para el Campo (que se firmó el lunes pasado en Palacio Nacional) se está echando a andar "el primer programa formal de vivienda para las familias del campo mexicano... y pronto vamos a empezar a hablar de cientos de casas construidas en las comunidades rurales para los indígenas y campesinos, y al paso de unos meses o de algún par de años ya estaremos hablando ¡de miles de casas construyéndose en el campo!"

Fox lo vislumbra de esa manera, con machacón optimismo, porque quien empieza "con tristeza a construir una casa, quien empieza con pesimismo, quien no ve por anticipado, con convicción la gran obra que está construyendo, difícilmente la va a poder construir".

Abriendo las primeras zanjas...

Ayer no sólo se trataba de hablar de viviendas. En las carretadas de optimismo que el mandatario dedicó a los mexicanos, dijo que de igual forma se está trabajando fuerte para generar empleos, ocupación productiva y mejorar los ingresos.

Y hay más que festejar. Porque entre todos esos pactos que se han logrado con el "gremio político", también hay que destacar "el gran Acuerdo Nacional para la Calidad Educativa, que ha derivado en muchas cosas buenas, en más de cinco millones de becas para otros tantos jóvenes y chiquillos en el país... en más de 900 mil becas para ir a la universidad y para ir a la educación media superior".

De ese acuerdo también ha surgido "la calidad en la educación, a mejorar día a día; la calidad de los maestros, la calidad de las escuelas... y así, paso a paso, vamos mejorando y haciendo de excelencia nuestro gran proyecto educativo pero, sobre todo, vamos haciendo accesible para nuestros jóvenes estar en una universidad y en la educación media superior".

A los campesinos y obreros, más buenas noticias dio ayer el mandatario: "estamos extendiendo nuestras tareas, y es el caso del Seguro Popular, porque queremos asegurarnos de que en el campo mexicano y en las colonias populares haya pleno acceso a un sistema de salud y que a cada uno de quienes detenten este Seguro Popular, que son quienes no tienen acceso al IMSS o al ISSSTE, se les dé esa garantía de atención médica. ¡Ya la pueden tener!".

Y quien adquiera ese Seguro Popular, tendrá "garantizado" consulta médica, medicamentos sin costo, hospitalización, intervenciones quirúrgicas y un examen médico para "el papá, la mamá y toda la familia". Este seguro, según informó Fox, "ya lo tienen 300 mil familias, pero con el compromiso que hicimos con el campo, ahora lo vamos a extender a todas las familias" de las comunidades rurales.

Así pues, puntualizó el Presidente, "vamos construyendo el país", en un trabajo que dibujó apoyándose en la labor de sus invitados: "a pico y pala, abriendo las primeras zanjas para ir haciendo los cimientos donde se van a construir las casas o donde se van construir los edificios... así estamos construyendo el país; asegurando fundamentos firmes y asegurándonos de que esta obra va a durar para muchos sexenios, para muchas decenas de años".

Por todo eso que falta, pero que "ya se empieza a construir", es que Fox convoca "a la unidad, motiva y derrama optimismo".