Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Miércoles 23 de abril de 2003
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Política

Consideran inviable la renegociación del tema agrícola

Escepticismo de la IP ante pláticas sobre el tratado

DAVID ZUÑIGA

Dirigentes del sector privado y analistas recibieron con escepticismo el anuncio sobre la ''nueva etapa'' del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), pues consideraron inviable la renegociación del apartado agropecuario y advirtieron que llegar a un acuerdo migratorio y a una mayor integración económica será un proceso largo y complicado, dadas las asimetrías entre México, Estados Unidos y Canadá.

El presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Héctor Rangel Domene, confió en que la nueva etapa propicie una ''sinergia'' de los sectores energéticos de los tres países, con interconexión de sistemas eléctricos y redes de suministro de gas natural.

A su vez, León Halkin, dirigente de la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin), aclaró que no se debe confundir este anuncio con una reapertura del tratado. La revisión del TLCAN a diez años de su aprobación, explicó, es algo que ya estaba previsto y no una decisión provocada por las presiones de organizaciones campesinas mexicanas.

No obstante, Halkin consideró que esta prospectiva puede servir para mejorar los mecanismos de solución de controversias para arreglar con Estados Unidos conflictos como los relacionados con el atún y el transporte, promover la construcción de cadenas productivas para que los beneficios de la apertura lleguen a la pequeña y mediana empresa y revisar la normatividad para evitar que leyes como la relacionada con el bioterrorismo se conviertan en barreras no arancelarias al comercio.

Por su parte, Gabriel Funes, director de Estudios Económicos de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), reiteró que la renegociación del apartado agropecuario del TLCAN es inviable y de darse representaría un riesgo para el sector. A México, señaló, solamente le quedan cinco años para tratar de hacer competitivos con tecnología y crédito a los únicos productos que falta desgravar totalmente: maíz blanco, frijol y jugo de naranja congelado. A juicio de Funes, México debe ''empezar a mirarse en el espejo de Europa'' y aceptar que en una década los tres países firmantes podrían llegar a una integración monetaria.

Mario Rodarte, director del Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP), opinó que no deben crearse expectativas poco realistas sobre la posibilidad de lograr un acuerdo migratorio con Estados Unidos, dado el endurecimiento de la política de ese país. Una integración económica al estilo de la Unión Europea, señaló, es poco viable, dadas las asimetrías económicas de México respecto de sus socios. El acuerdo migratorio ''posiblemente sea una de las tantas ideas de México a las cuales sus interlocutores simplemente no les hacen caso porque las consideran fuera de la realidad''.

Finalmente consideró poco probable que pueda renegociarse el TLCAN para proteger a productores de maíz y de frijol.

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