EL FRESNO

Para muchos de nosotros ha sido una alegría ver a los fresnos de la ciudad variar sus gamas de color; hace unas semanas se cubrieron de hojas color verde tierno y en este tiempo cambian a un verde más intenso. En el mundo existen cerca de 60 especies de fresno (alguna tiene características de arbusto, la mayoría son árboles de tallas mediana y grande), casi todas nativas del hemisferio norte, 15 de éstas son originarias de México.

El fresno Uhdei está presente en el Valle de México desde tiempo inmemorial; por su belleza ha sido utilizado como árbol de ornato y para alineación. Fueron plantados por gobernantes mexicas para crear el Bosque de Chapultepec; después, al establecerse las haciendas en los alrededores de la ciudad, se plantaron en las calzadas de acceso a las casas principales. Muchos de ellos se pueden ver aún hoy, en banquetas de calles y avenidas de la ciudad.

Por ser nativo de esta región el Fraxinus uhdei tiene un crecimiento vigoroso y durante su vida es de los árboles más sanos. En el país hay otras especies de fresno, las más difundidas son: fraxinus Berlanderiana, en Veracruz; fraxinus Greggii, en Coahuila y San Luis Potosí, y Purpusii, en Chiapas, Oaxaca, Michoacán, Hidalgo y Puebla.

Abundante follaje

Los fresnos del Valle de México son árboles de gran talla, pueden llegar en su madurez a 40 metros de altura y algunos todavía más; están entre los que alcanzan mayor altura en el mundo. Su tronco (fuste) tiende a ser recto, cuando jóvenes su corteza es lisa, en la madurez se transforma en rugosa; posee un buen sistema de ramificación y un follaje abundante, esto lo hace magnífico árbol para proporcionar sombra, sus hojas son ligeramente aserradas y se desarrollan opuestas, aparecen por pares, salvo la de la punta de cada ramilla. Florece entre enero y febrero, sus semillas maduran entre agosto y septiembre, y es de gran copa; de hoja caediza (caducifolio) y se reproduce por semilla y por estaca.

Las semillas aparecen en racimos y cada una posee una aleta que le ayuda a viajar lejos de su origen para reproducirse, y quedar en posición para germinar en la tierra.

Referencia de Sahagún

Bernardino de Sahagún, escribió ''Hay fresnos en esta tierra y llamanse ilin"

Fresno en purépecha = paramu

 en zapoteca = yaga - guillaa

 en ñañuh = udzaté
 

Arbol longevo

La madera del fresno es blanca y su conformación, fuerte y elástica, permite un buen torneado; con ella se hacen hormas para zapatos, juguetes, mangos para herramienta, bates para jugar beisbol, barras para gimnasia, remos; también se emplea para hacer los rodetes en los que se pica la carne en las carnicerías y taquerías, pues su madera no transmite sabor a lo que se pica y es resistente a la destrucción por el golpe repetido del cuchillo. Un uso importante en las poblaciones, donde prospera el fresno, es para la manufactura de mazas y partes de carreta; también, con su madera, se hacen muebles artesanales e industriales.

Los espacios abiertos, como parques y camellones amplios son ideales para plantar fresnos. Con los años su tallo y raíces requieren de espacio vital para desarrollarse, pues el ritmo de crecimiento es relativamente rápido en sus primeros años y cuando alcanza cerca de 20 metros de altura, el ritmo disminuye; en 100 años llegará a unos 30 metros de alto. En buenas condiciones de suelo y humedad puede llegar a vivir más de 600 años.
 
 


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