ASTILLERO
Julio Hernández López
Ojo con el Amigate
El Presidente se exculpa a sus puras botas
Un bolerito mexicano podría hacer chuza en bolsa
OJO DE LIEBRE se llama la laguna de Baja California Sur en la que ayer el Presidente de México se dedicaba al deporte extremo del avistamiento de "ballenotas gigantescas". Hasta aquellos parajes de ensueño llegó la bola de nieve con nariz de Richard Nixon, que llamaremos Amigate, y a pesar de que el esposo de la señora Marta quería eludir el tema, los reporteros fajadores le hicieron pronunciar a la carrera y de mala gana algunas frases relacionadas con el escándalo desatado un día antes por el informadísimo Eduardo Fernández, las cuales, como ya es costumbre, obran en su contra (antes de hacerlo declarar, los periodistas deberían recitar al Presidente de México la letanía de los policías gringos a los detenidos).
NO HUBO MESURA ni serenidad en la manera de abordar las terribles acusaciones hechas por quien fue presidente de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, y sí un rápido poner tierra de por medio, que refuerza la percepción olfativa mediática de que algo anda mal. "ƑNiega que hubo lavado de dinero en su campaña?", le soltó un periodista, y Fox respondió: "Absolutamente lo niego, absolutamente lo niego, claro que lo niego". Otra interrogación parecida y la desesperación presidencial: "Absolutamente no. No, no, no, Ƒpor qué tienen que creerle a un tipo así?". Y, por si no hubiera quedado claro: "Ya dije que no hay nada, ni de lavado ni nada en la campaña", cual si su simple palabra fuese sentencia definitiva, cual si no fuese él mismo el acusado cuyas pretensiones absolutorias deberían adjuntarse al expediente judicial como meros alegatos parciales. Pero a Vicente Fox le parece que si él "ya dijo" que algo es de una manera, así deben entenderlo y asumirlo los medios y los ciudadanos todos. Añadió el mandatario que "el PAN ya entregó toda la información y está muy clara. No tenemos absolutamente nada de qué preocuparnos". Reaccionando como perseguido, hablando a la defensa, descalificando a sus puras botas la denuncia al estilo de "enójense las comadres" que le puso el susodicho Fernández, y que ayer mismo tuvo graves repercusiones económicas (el dólar a 11.15 pesos, y no sólo por los tambores bélicos) y políticas (el IFE ahondará en las revelaciones), el primer amigo del país prefirió personalizar el asunto, emitiendo rápido diagnóstico sicoanalítico que adjudicaría los dichos de Fernández a que "se puso nervioso", y enderezando el índice flamígero contra su acusador (al que no sólo podrían meter a la cárcel, como abiertamente anunció ayer el Ejecutivo, sino también darle un par de puñaladas, cual si fuera presidente de Instituto Electoral del Estado de México, ya fuese por venganzas instruidas o por provocaciones electoralmente convenientes a sus adversarios).
OJO DE HORMIGA se va poniendo pues la situación. Lo denunciado por el súbitamente famoso Fernández lesiona la credibilidad de un Presidente que a pura saliva pretende negar indicios de responsabilidad penal en el financiamiento de sus campañas de proselitismo. Pero, además, arroja luces increíblemente delatoras respecto a los pantanos en los que se procesan los reportes oficiales en materia bancaria y financiera, que luego nuestros prohombres nos presentan en público, blanqueados y muy bien planchados. El hombre que durante largos años conoció las entrañas del monstruo del gran dinero ahora nos revela que las indagaciones sobre lavado y tintorería han sido en realidad arreglos confidenciales, sin constancia documental, en los que ha participado la misma estructura institucional, que ahora trata a marchas forzadas de tirar al mar las constancias de las triangulaciones hechas para financiar la campaña foxista.
ANTE LA MAS grave acusación hasta ahora recibida, los Amigos de Vicente reaccionan con desparpajo significativo: Carlos Rojas, quien quiso pagar algo de las deudas de campaña a base de toallazos, dice que duerme tranquilo; Lino Korrodi mantiene su aire de tamaulipeco desenfadado y tendrá hoy una reunión privadísima con Eduardo Fernández para tratar de hacerle entender que "hay que dejar al jefe fuera de todo"; Miguel Hakim sigue despachando en Relaciones Exteriores y dice no tener cola lavada que le pisen, y sosegados también deben estar Luis Ernesto Derbez (de quien sabida era su participación en los enjuagues trianguladores) y la última adquisición de la sociedad civil, el ex canciller Castañeda, a quienes la comadre enojada de apellido Fernández ayer agregó a la lista de involucrados.
El Amigate no queda, sin embargo, en el suficientemente grave punto del lavado de dinero, el crimen de Estado y la conspiración institucional. Lo peor vendrá cuando se sepa de dónde vino el dinero, es decir, qué intereses fueron los que pusieron capital en la aventura llamada Vicente Fox, cuáles son los nombres de las empresas financiadoras de la campaña del supuesto cambio y cuáles han sido las expectativas de recuperación de la inversión que esos negociantes han tenido (Ƒprivatizaciones de áreas como la energética; expropiaciones de ingenios cañeros; concesiones y contratos todavía desconocidos?). Con un agregado desestabilizador: las grandes empresas que estuvieran involucradas en el Amigate seguramente cotizan en la Bolsa de Nueva York, y en esa, y en la mexicana, un enredo de la magnitud de las revelaciones que Fernández sostiene podrían causar caídas en precios de acciones y apertura de investigaciones de orden criminal, que a estas alturas muy bien caerían a los gringos deseosos de hacerle manita de puerco al terco Presidente mexicano que no quiere votar en favor de la guerra en Irak (gringos, dígase aquí como breviario cultural, ya para cerrar el punto, que son los auténticos patrones del bolerito mexicano que nombró a Guillermo Ortiz en Hacienda y lo hizo gobernador autónomo del Banco de México, y que tuvo como ejecutor de lujo de las maniobras fobapróicas al nuevo héroe cívico de apellido Fernández).
ASTILLAS: ƑQuién (quiénes, en realidad) se prestó (se prestaron) para enturbiar el ambiente electoral de un estado donde el gobernador mostró una y varias veces habilidad extrema para enredar a las autoridades panistas en hechos de sangre y en asuntos judiciales? Huele a maniobra montielista, pero el Presidente y su señora han creído que la lucha por el poder se resuelve con vacilones rancheros y declamaciones escolares... Por cierto, un cable de EFE dice que Televisa transmitirá, con cargo a la Fundación Vamos México, un programa de una hora a la semana para difundir la Guía de padres. Y algo así como un Big Marta, pues "fuentes del DIF indicaron que las familias que accedan a participar en el programa serán grabadas en sus hogares durante 24 horas".
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