EU BAJO ATAQUE
Jim Cason y David Brooks
El temor como política interna
El plástico contra la "amenaza permanente"
Seguridad por Internet en caso de ataque
Primero fueron los escritorios, después los hoyos
y ahora es la cinta adhesiva y de plástico en las recomendaciones
oficiales para proteger a la ciudadanía ante una permanente amenaza
contra Estados Unidos.
Hoy como siempre, la amenaza y el temor han sido elementos
claves en la política interna de Estados Unidos, un país
que siempre está, dicen, bajo ataque.
En los años 50 y 60 el gobierno aconsejaba a este
pueblo protegerse contra el peligro de una bomba nuclear escondiéndose
debajo de muebles y en refugios por todo el país, y difundió
didácticos documentales que mostraban a niños de siete años
practicando cómo esconderse debajo de sus escritorios en las escuelas.
En los 80, el gobierno de Ronald Reagan desarrolló
formas más sofisticadas para los ciudadanos ante la amenaza de un
ataque nuclear: los ciudadanos deberían excavar un hoyo, cubrirlo
con un par de puertas, echarle tierrita y esconderse ahí. El único
desafío, señalaron los funcionarios, era asegurar que se
contara "con suficientes palas para todos".
Ahora,
en 2003, el gobierno nuevamente ofrece consejos a la ciudadanía
contra otra -¿o es la misma?- amenaza. Aunque ya no hay guerra
fría, existe algo que se llama "el mundo post 11 de septiembre".
Un mundo en el que, según el gobierno estadunidense, es casi inevitable
que se intente un ataque nuclear, químico o biológico por
parte de los "malévolos", esos que han sustituido al viejo "imperio
del mal" (la ex URSS).
Para proteger a la ciudadanía ante tal amenaza,
el nuevo secretario del Departamento de Seguridad Interna, Tom Ridge, instó
a las familias del país a comprar cinta adhesiva de construcción
y mantas de plástico para sellar los cuartos de los hogares en caso
de ataque. "No estaremos atemorizados, estaremos listos", afirmó
el secretario.
Pero a pesar de la retórica, el temor es precisamente
lo que el gobierno desea difundir por la toda la población. ¿Para
qué más serviría una campaña de esta naturaleza?
Tal vez durante la guerra fría la gente
creía que esconderse debajo de escritorios o en hoyos podría
protegerlos de una explosión nuclear; pero es poco probable que
una mayoría se haya tragado enteros estos consejos. Pero hoy casi
nadie mínimamente consciente cree que las mantas de plástico
y cintas adhesivas van a protegerlos de un ataque con armas de destrucción
masiva. "Creo que estaríamos más seguros debajo de nuestros
escritorios", bromeó el columnista Bill Press. Varios legisladores,
expertos y hasta el alcalde de Nueva York públicamente han descartado
estas ideas, calificándolas incluso de absurdas.
Pero el gobierno insiste en que no bromea. El Departamento
de Seguridad Interna ha gastado más de un millón de dólares
en campañas de publicidad y relaciones públicas, lanzó
un sitio de Internet y estableció un número sin tarifa 800
en inglés y español para difundir sus consejos: adquieran
cinta adhesiva y mantas de plástico y almacenen agua y alimentos,
papel, camisas de algodón y radios de pilas en todos los hogares,
junto con zapatos tenis.
Toda la familia debería estar preparada, incluso
los niños. La Agencia de Emergencia Federal de Desastres, en algo
que puede compararse con los instructivos para niños en los 50,
ha establecido un sitio de Internet para niños. "Los desastres no
son divertidos, pero aprender sobre ellos sí lo es", declara la
agencia. El sitio describe para los menores el sistema de código
por color del nivel de amenaza de un ataque "terrorista", recomienda a
los infantes armar sus propios estuches de emergencia que incluyan algunos
libros favoritos, crayolas, una almohada y fotos de la familia.
El sitio de Internet presentado por el Departamento de
Seguridad Interna (www.ready.gov), ofrece consejos específicos ante
un atentado con armas biológicas, químicas y nucleares, y
tal vez es recomendable bajar esta información de una vez
ya que en caso de ataque podría no funcionar la computadora. Pero
el problema es, ¿qué hacer con toda esta información?
Cuando el gobierno difundió primero esta información
hace 10 días, la gente empezó a sellar sus casas con plástico,
pero esta semana el gobierno dijo que el asunto no era tan urgente, sino
que uno debería contar con estos materiales en caso de....
Pero ahora resulta que no es en caso de, sino de cuándo.
El gobierno repite que otro atentado "terrorista" en Estados Unidos es
"sólo cuestión de tiempo". Esta semana, el gobierno había
elevado su nivel de amenaza de "amarillo" o elevada, a "naranja" o de alta
probabilidad de ataque, y la CIA advirtió que podría haber
tal atentado en cualquier momento. El secretario de Defensa agregó
que era "casi seguro" que alguien detonaría una bomba nuclear en
Estados Unidos en un futuro cercano.
No está claro cuánta cinta adhesiva se necesita
para una alerta de nivel amarillo comparada con una de color naranja. Pero
tantos mensajes sobre amenazas y el temor que nutren parecen menos diseñados
para preparar a la ciudadanía ante un posible ataque, y más
para preparar al país para una guerra.
Para muchos quedó claro que el nivel de amenaza
se elevó justo cuando el presidente lanzó una nueva campaña
para persuadir a un público poco convencido de la necesidad de una
acción militar contra Irak.
Pero todo esto no logró reducir el escepticismo
popular sobre una guerra contra Irak. Tal vez la próxima vez el
gobierno tendrá que elevar el nivel de amenaza a "rojo" para lograr
vender la guerra... y un poco más de cinta adhesiva.