El vacío por habitar la metrópoli,
tema de Callejón lis
Pensión vudú hurga en la ternura
que tiene la tragedia
Ambos montajes se estrenarán en el teatro La
Capilla
Prosigue la celebración por los 50 años
de ese recinto
CARLOS PAUL
La ternura de lo trágico y una mezcla de lo lúgubre
y lo lúdico es lo que ofrece Pensión vudú, espectáculo
de cabaret gótico con títeres y actores, ''para adolescentes
y adultos perversos", que será estrenado este viernes en el teatro
La Capilla.
Escrita
por la dramaturga quebequense Louise Bombardier y dirigida por Emmanuel
Márquez y Boris Schoemann, la obra ''se conforma por pequeños
sketches, monólogos y diálogos lúdicos y lúgubres,
en los que aparecen desde personajes con problemas enormes de personalidad
hasta engendros rechazados por sus familias, todos viviendo en una pensión
surrealista".
Al penetrar en ese lugar, comenta Márquez, conoceremos,
entre otras historias, la de una virtuosa pianista enamorada de su alfombra
(una piel de oso), a unos adorables huerfanitos que con desesperación
buscan a su mamá por todo el mundo, para al final quemarla, a una
asombrosa mujer-caballo, a Hugo ''el biendotado', a Lili, 'la asaltacunas',
personajes que sirven como pretexto para regodearse con humor en lo sombrío,
en la ternura que tiene lo trágico".
Exageración y divertimento
Los títeres, diseñados por Haydeé
Boetto y confeccionados por los actores, ''ayudan a jugar con esas personalidades
y sus diferentes dimensiones, pues finalmente son como unos monstruos hermosos
y tiernos, incestuosos y asesinos, que han sido abandonados y están
perdidos en esa pensión".
La obra esta dirigida ''a adolescentes y adultos perversos",
añade Schoemann, ''pues hay cirugías de pene, pezones quemados,
lo cual es más fácil hacerlo con títeres que con actores.
Cuando decimos perverso, es porque creemos que la puesta es divertidísima
por ser tan exagerada. Además, porque queremos que el espectador
sepa desde el principio que aquí puede explotar su morbo".
Con Pensión vudú, cuya puesta en
escena esta a cargo de la compañía Los Endebles, continúa
la celebración del 50 aniversario de La Capilla, y será estrenada
el viernes 7, a las 20 horas, en Madrid 13, esquina Centenario, Coyoacán.
Ser y no ser
Callejón de lis, de Joseph Danan, dirigida
por Jean-Frédéric Chevalier, con nueve actores y un niño,
es otra de las obras que se presenta en ese foro y su estreno es hoy a
las 20 horas, en ese espacio teatral.
El montaje, comenta Chevalier, intenta reflexionar, ''sin
juicios morales o lecciones", sobre el vacío interior que produce
vivir en una enorme ciudad.
''Por medio de la historia del personaje de Tomás,
quien vacila entre dos ciudades, dos mujeres, y el de Loretta, quien arriesga
su vida más allá de cómo lo hace Tomás, tanto
que la lleva al suicidio, tratamos de provocar los sentidos del público,
de tal manera que ponga en crisis su cotidianidad, abarcando también
momentos de júbilo", apunta el director.
''Queremos, en principio, tocar emocionalmente a cada
espectador, para que construya su propia historia. Aquí, esa tragedia
no es triste, por decirlo de alguna manera, sino como una metáfora
de decirle al espectador que las cosas que se viven van en serio, pues
en la actualidad una definición de lo trágico no es sólo
como lo planteaba Shakespeare: ser o no ser, sino que lo trágico
hoy día es: ser y no ser, simultáneamente."