Se hacen en Veracruz los primeros estudios sobre efectos del calentamiento de la Tierra

México, de los más afectados por el cambio climático mundial: INE

Se debe saber dónde lloverá más, dónde habrá sequía y cuánto subirá el nivel del mar: Adrián Fernández

ANGELICA ENCISO L.

Ante la inminencia de que se acentúe el cambio climático mundial, aun con la firma del Protocolo de Kyoto, el gobierno mexicano empezará a determinar medidas de prevención para tratar de atenuar las consecuencias que traerá ese fenómeno. El primer sitio en estudio es Veracruz, donde ya se analiza cuáles son las zonas más susceptibles a sequías, inundaciones y a todos los efectos que ocasionará el aumento en la temperatura.

El Protocolo de Kyoto es el compromiso internacional en el que se establecen las medidas que las naciones deberán tomar para reducir sus emisiones de gases con efecto invernadero, sobre todo el bióxido de carbono, que se genera por la quema de combustibles fósiles y es el principal causante del cambio climático. Estados Unidos es el país que más gases ocasiona y ya anunció que no firmará el documento.

El efecto invernadero se da cuando la presencia de gases -bióxido de carbono, ozono, metano y clorofluorocarbonos- impide la salida de las radiaciones que se presentan en la Tierra, lo que ocasiona su calentamiento; se estima que la temperatura de la superficie terrestre es 14 grados centígrados más alta de la que habría sin ese fenómeno.

En años recientes las naciones centraron su trabajo en la meta de reducir la generación de los gases con efecto invernadero y en la forma en que cada una se vería afectada con el cambio climático, pero ahora es necesario definir la forma en que México se adaptará a este fenómeno, sostuvo en entrevista Adrián Fernández Bremauntz, director general de Investigación sobre la Contaminación Urbana, Regional y Global, del Instituto Nacional de Ecología (INE), organismo desconcentrado de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).

Detalló que la agenda de mitigación de emisiones de gases con efecto invernadero centra su atención en las medidas para disminuirlas en el sector industrial, con el uso de combustibles más limpios, aunque también había interés en hacer los estudios para determinar la vulnerabilidad de los países.

La estimación de los científicos del Panel Intergubernamental de Cambio Climático es que habrá un aumento en la temperatura en los próximos 100 años y que es necesario definir los impactos que esto tendrá. "Se debe tener claro en qué partes de México puede llover más, dónde habrá inundaciones y más sequía", con el propósito de contar con medidas preventivas ante el fenómeno.

"México y otros países tienen la preocupación de que habrá impactos aun con la aprobación del Protocolo de Kyoto, que todavía no entra en vigor porque falta la firma de Rusia, y con el cumplimiento estricto de los compromisos de las naciones signatarias, porque esas acciones no son suficientes para frenar el impacto global que tiene la creciente contaminación".

Está el consenso de que todos los países tienen que trabajar en el tema de adaptación a la nueva temperatura del planeta, y México no puede quedarse atrás, por lo que se dará mayor importancia a los temas de mitigación y adaptación que en el pasado no se atendían.

En los discursos que las autoridades mexicanas han presentado en los foros internacionales plantean hacer uso de la adaptación, porque si no "llegaremos tarde y vamos a tener el problema encima; es claro que hay ciertos sectores que van a sufrir mucho y va a haber serios problemas.

Habrá años calientes y otros fríos

"Es muy probable que con el fenómeno mencionado la frecuencia y la intensidad de los eventos meteorológicos extremos aumenten, lo que obliga a estar preparados porque vamos a tener años más calientes y otros más fríos. Se buscará tener estrategias para equipar mejor las instalaciones domésticas, tener un mejor diseño en las viviendas y adecuar las ya existentes", dijo Adrián Fernández.

Como ejemplo, mencionó que si en lugares muy calientes las azoteas de los edificios se pintan de blanco, reflejan la radiación solar y eso evita que su interior se caliente, por lo que se utiliza menos el aire acondicionado. Otra posibilidad es emplear dobles vidrios en las ventanas, porque así concentrarían la temperatura interior y se dejaría de utilizar calefacción y con ello los combustibles fósiles. Asimismo, precisó, es necesario revisar la normatividad de las construcciones en las zonas costeras, porque se espera que se eleve el nivel del mar.

Ante esta situación se comenzaron a hacer trabajos preliminares en Veracruz para establecer las zonas vulnerables al cambio climático. Las playas de ese estado son estrechas y desaparecerán si sube el nivel del mar, por lo que se revisará la normatividad de las construcciones y de la infraestructura turística, con el propósito de contar con las salvaguardas adecuadas y evitar daños.

Puntualizó que México no puede hacer nada frente al cambio del clima, aunque será una de las naciones más perjudicadas por ese fenómeno. "La cuestión es ser realista y entrarle a la adaptación. Hay el interés del gobierno de Veracruz y de los empresarios del sector turístico, por lo que la delegación de Semarnat empezó con el análisis y acordamos hacer la revisión de la situación de ese estado como un estudio de caso, del cual se pueden tomar las generalidades y aplicarlas en otras zonas con características similares".