Evitan paro en el tren ligero y trolebuses; 400 jubilados recibirán el beneficio
Concede el GDF aumento salarial de 7 por ciento a los tranviarios
Las autoridades aceptan entregar un predio al sindicato para un centro de capacitación
ELIA BALTAZAR
La amenaza de huelga en el Sistema Transportes Eléctricos se eliminó ayer por la tarde luego de que las autoridades capitalinas y la Alianza de Tranviarios de México, que encabeza Benito Bahena, llegaron a un acuerdo en el pliego de demandas de los trabajadores.
Después de casi siete horas de negociación en la Junta Local de Conciliación y Arbitraje y de someter a votación de la Asamblea de Trabajadores Tranviarios los acuerdos, autoridades y sindicato consintieron en un aumento de 7 por ciento directo al salario para todos los empleados, incluidos 400 jubilados. Este incremento, según Bahena, repercutirá en las prestaciones de que gozan los trabajadores.
Se convino además la entrega de un predio de 9 mil 595 metros cuadrados ubicado en la delegación Azcapotzalco en el que se construirá un centro de capacitación para los trabajadores del Sistema de Transportes Eléctricos. El proyecto tendría un costo de un millón 200 mil pesos según el líder de la Alianza. Además, dijo Bahena, quedó atrás la pretensión de las autoridades capitalinas de mutilar 40 artículos de su contrato colectivo de trabajo, lo que afectaría a la mayor parte de los 3 mil 200 empleados que laboran en el Sistema de Transportes Eléctricos. Estos acuerdos y la firma del convenio correspondiente conjuran de manera definitiva la amenaza de huelga que los tranviarios tenían programada para el primer minuto de hoy. El sistema, por tanto, funciona ya normalmente para otorgar servicio a los 250 mil usuarios que a diario se transportan en tren ligero y trolebuses.
Ya por la mañana de ayer, luego de la reunión del gabinete de seguridad, la directora del Sistema de Transporte Eléctrico, Florencia Serranía, había expresado su confianza en que el conflicto con el gremio de tranviarios alcanzaría una solución, pues ambas partes mostraban disposición para llegar a acuerdos.
"Nosotros -dijo la funcionaria- no vemos ninguna razón para que exista el estallamiento de huelga". En todo caso explicó que si el acuerdo no hubiera llegado las autoridades habrían recurrido a la red de transporte público de pasajeros para prestar el servicio.
Fue al filo de la una y media de la tarde cuando autoridades y representantes de la Alianza de Tranviarios de México se reunieron en las instalaciones de la Junta Local de Conciliación y Arbitraje para discutir el pliego petitorio, luego de protestas de los trabajadores frente a estas oficinas y la sede del gobierno capitalino.
A las 7:30 autoridades y trabajadores habían acordado el aumento y la entrega del predio, que significó uno de los puntos de mayor conflicto pues el gobierno capitalino argumentaba la necesidad de regularizarlo primero.
Respecto de esta última petición, Florencia Serranía explicó que el gobierno capitalino había pedido tiempo a los trabajadores para llevar a cabo la regularización del predio, pero esta demanda "de ninguna manera podía ser un punto de presión para estallar el movimiento".