Ratifica que mantendrá el corto para
anular presiones inflacionarias
Descarta Guillermo Ortiz intervención del Banco
de México para defender el peso
Incertidumbre y año difícil, prevén
el gobernador del BdeM y el titular de Hacienda
ANTONIO
CASTELLANOS
El Banco de México no intervendrá en el
mercado cambiario para defender al peso y mantendrá la aplicación
del corto para frenar presiones inflacionarias. Descartó que la
restricción monetaria provoque desaceleración económica
como dicen las corredurías. Sin embargo, advirtió que si
los incrementos salariales no se mantienen dentro de los límites
de la inflación, el desempleo continuará.
Por cada punto que se incremente por arriba de la meta
prevista de 3 por ciento, se perderán 90 mil plazas. En los pasados
dos años se cancelaron más de 320 mil empleos, precisó
el gobernador del Banco de México, Guillermo Ortiz, y coincidió
con el secretario de Hacienda, Francisco Gil Díaz, en que hay incertidumbre
en la economía mundial. Para la de México, indicaron, se
perfila un año difícil.
Agustín Carstens, subsecretario de Hacienda, anunció
que este mismo año se enviará al Congreso una iniciativa
para impedir la quiebra de bancos. En este momento, la banca se encuentra
en su mejor momento; no es que haya problemas con alguna intermediaria,
pero se quiere tener los elementos necesarios para actuar de manera inmediata
para evitar el colapso de algún banco, sobre todo ahora que el Instituto
para la Protección al Ahorro Bancario ha reducido el seguro de depósito.
Gil Díaz y Ortíz Martínez estuvieron
de acuerdo con que es necesario mantener los precios de productos y servicios
públicos en 2.7 por ciento, por debajo de 3 puntos, que es la meta
inflacionaria. El secretario de Hacienda aceptó que el año
pasado la desviación fue de 17 por ciento. El gobernador del banco
central dijo que fue de 11 por ciento, pero al final determinaron que la
inflación llegara a 5.7 contra la meta de 4.5 por ciento.
Los dos hablaron por separado en el seminario sobre las
perspectivas económicas y los riesgos del crecimiento, organizado
por el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM).
En sus participaciones desestimaron las proyecciones de algunas corredurías
que recomendaron invertir en Brasil y abandonar México, por la política
monetaria restrictiva que, según esos analistas, provocará
estancamiento.
El
secretario de Hacienda consideró que el precio de 18.35 dólares
por barril de petróleo tiene un alto contenido de volatilidad; por
lo tanto es imposible hacer una predicción, pero ahora por circunstancias
en alguna medida fortuitas, hay un precio por encima de ese nivel (arriba
de 28 dólares), que hacen que la propuesta del Congreso sea perfectamente
"alcanzable y con alguna probabilidad incluso de superarla".
Más de 320 mil empleos perdidos en los pasados
dos años
El gobernador del Banco de México fue menos optimista
y expuso que para 2003 se anticipa que la economía mundial experimente
una recuperación, pero aclaró que el crecimiento continuará
siendo débil. Los más de 320 mil empleos perdidos en los
pasados dos años, recalcó, serán difícil de
recuperar. De acuerdo con las proyecciones de competitividad del Foro Económico
Mundial, México perdió terreno al pasar de la posición
21 a la 45, indicó.
Ortiz Martínez hizo ver que la evolución
del precio del petróleo se encuentra sujeta a un elevado grado de
incertidumbre. En este año, dijo, la economía mexicana estará
condicionada a los siguientes factores: el vigor de la recuperación
de la economía estadunidense; las condiciones de acceso al financiamiento
externo de México y el avance en la agenda de las reformas estructurales.
En el año en curso, agregó, habrá
crecimiento de 3 por ciento y se registrará una creación
de empleos moderada. Para evitar fluctuaciones abruptas del empleo y para
alcanzar una mayor generación de éste en un entorno de bajo
crecimiento de la demanda externa y estabilidad de precios, es necesario
que:
Los salarios nominales se flexibilicen, convirtiéndose
así en la principal variable de ajuste del mercado laboral y que
la demanda por trabajo aumente por medio de reformas estructurales que
incrementen la productividad de la mano de obra.
Ortiz Martínez planteó la necesidad de reforzar
los elementos que permitan alcanzar tasas de crecimiento elevadas, al aumentar
la competitividad en un entorno internacional menos propicio. Se hacen
necesarias la reforma del sector de energía; la profundización
del proceso de regulación económica; la promoción
del desarrollo del mercado de capitales y el logro de tasas de ahorro interno
más elevadas. También garantizar la seguridad física
y jurídica; el estímulo a la inversión en infraestructura,
tecnología, educación, salud y la reforma laboral.