De 6 años en adelante

LA FLOR MAS GRANDE del mundo, de José Saramago, con ilustraciones de Joao Caetano (Alfaguara), descubre a un narrador preocupado, principalmente, por compartir con los adultos las historias para niños, "para volvernos capaces de aprender lo que, desde hace tiempo, venimos enseñando". Por eso, el premio Nobel lusitano aclara en el inicio del cuento: "Las historias para niños deben escribirse con palabras muy sencillas, porque los niños, al ser pequeños, saben pocas palabras y no las quieren complicadas". Saramago escribe sobre un niño héroe que salva a una flor de la sequía, llenándola de aromas multicolores. Y lanza una invitación a sus pequeños lectores: "¿Quién me dice que un día no leeré otra vez esta historia, escrita por ti que me lees, pero mucho más bonita?"

Hasta 3 años

¡MIRA LO QUE TENGO!, de Taro Gomi, editado por el Fondo de Cultura Económica, está diseñado para que los bebés puedan jugar con el libro: tocarlo, morderlo, tirarlo, observar las imágenes y estimular su desarrollo motriz fino al meter los deditos en el par de hoyos que hacen imaginar al pequeño que agarra una flor, un cebollín, un caramelo, un tazón de sopa, un honguito, una cuchara y hasta una pequeña tuerca. Como juguete, el libro irá cambiando su sentido al crecer el bebé. Con el aprendizaje de la lectura y la ayuda de los padres, el pequeño podrá inventar historias alrededor de las ilustraciones e incluso ponerle nombre al simpático changuito verde que se presenta como su amigo en la última página de este objeto de enseñanza y divertimento.