ASTILLERO
Julio Hernández López
Lo mejor: que el futuro no sea peor
ƑTienen buenos propósitos de Año Nuevo los políticos mexicanos?
Minucias y frivolidades en temporada de caza electoral
POR MAS ESFUERZO que hizo para conocer los propósitos y deseos de Año Nuevo de los principales personajes políticos mexicanos, la Agencia de Falsa Inteligencia (afi, con minúsculas, por su mal trabajo) de esta columna voyerista no consiguió más que material de mala factura que, obviamente, el departamento de control de calidad de Astillero rechazó de inmediato, comprometido como está con su exigente público a ofrecerle solamente productos de primera y no de pacotilla. Sometidos a consejo de guerra (previo arreglo consistente en castigarlos sólo por lo intrascendente y en dejarlos en libertad prontito), los generales directores de la citada agencia privada de espionaje astillado aseguraron haber tenido a la vista los listados de peticiones y buenas intenciones de los más reconocidos actores del mundillo farandulero de la política mexicana, pero estimaron que todos eran balines (Ƒlos propósitos y los políticos?), pues en ellos sólo se muestra que ninguno de los grillos importantes pretende otra cosa que ganar o mantener su popularidad, nadar de a muertito sobre los problemas reales y hacerse de la mayor rebanada posible del pastel electoral del año en puerta (al menos así cantó uno de los interrogados, antes de ser sometido al tratamiento del suero de la verdad, vulgarmente conocido como tehuacanazo).
REVISADO COMO FUE el catálogo de buenos deseos que los investigadores de Astillero habían incautado, el comandante tecleador en jefe coincidió con sus para entonces muy maltratados sabuesos: tratamientos capilares urgentes, maquillajes faciales más discretos y el Manual de Chabelo para Parecer Joven después de los Sesenta, pretende para el año venidero, pues sus propósitos son meramente estéticos, un altísimo político de apellido que a la censura abascalista le pareció inmoral: algo así como fuck. Un sistema de dicción que le ayude con las eses y tomas televisivas y fotográficas que disimulen el paso de los años de parte de la primera dama en ser presidenta sin que la elijan. (Propósitos nimios, hogueras de vanidades, insiste esta columna armada de bastón de viejito para repartir golpes a diestra y siniestra, e incluso a derecha e izquierda.) Un compactador de palabras para que sus largas pausas a la hora de dar declaraciones matutinas puedan ser eliminadas y así se escuchen frases a velocidad promedio y no parezca concurso de lentitud verbal, pretende un trovador chilango-tropical con ansias de torero de plaza grande. Un yoyo gigante, para así poder darse el gusto de rebasarlo, de parte del Idolo de Tlatelolco. Que no lo manden de diputado federal, desea el güero de Bucareli. Que ya lo saquen de diputado y lo manden aunque sea a Bucareli anhela Felipillo, no González sino Calderón. Más presupuesto gastable a discreción, Sari Bermúdez y Nelson Vargas, jefazos de la cultura y el deporte (Uff, como podrá darse cuenta el lector, pura baratija: Ƒdónde los preclaros propósitos republicanos, a qué hora aparecen los proyectos trascendentes tan necesarios en esta hora oscura de la Nación? Así es que, antes de que se ponga más masiosare, este escribano da paso a una reflexiva reflexión que preparó para esta fecha, mientras veía al dólar cotizarse a 10.57 pesos, y a la Policía Federal Preventiva prepararse para la gran batalla del 1Ŷ de enero contra los campesinos mexicanos que amenazan con tomar decenas de puntos fronterizos).
LO MALO DEL año que se va es que no deja ingredientes para preparar un mediano platillo de esperanzas para el venidero: a como se ven las cosas, lo mejor que puede pasar es que no empeoren. Véase la situación internacional, con una economía estadunidense maltrecha y la maquinaria bélica apenas contenida por no encontrar todavía justificación mínimamente aceptable para lanzarse contra Irak; o con naciones hermanas como Colombia y Venezuela, intervenidas desestabilizadoramente por la potencia norteña o desangradas económica y socialmente como Argentina; o con expectativas como la brasileña, que en caso de ser descarrilada podría arrastrar a otras economías en su caída. Pero, sobre todo, valórese la debilidad institucional del ejercicio público del poder en México, con un Presidente menguado cuyas deficiencias tratan de ser cubiertas a título de ambiciones propias por su cónyuge desatada; con un sistema de partidos devaluado ante los ciudadanos que ven diariamente que la política es convertida en botín y privilegio (y ello vale para izquierda, si tal fuese el PRD; derecha, suponiendo que su representante sólo sea el PAN, y la geometría descuadrada y dislocada del PRI deshilachado); con un Poder Legislativo gastado por sus males propios y por los que le añade la propaganda presidencial tratando de culparlo de lo que no se ha podido hacer o se ha hecho mal.
POCO MARGEN QUEDA, pues, para elaborar propósitos de Año Nuevo que vayan más allá de la corrección de errores o de posturas superficiales. No hay proyectos políticos ni los líderes que la desgracia nacional reclama. El calendario se irá deshojando entre ocurrencias menores y ambiciones mayores, entre el ahi se va cotidiano y la guerra cíclica por los cargos, los presupuestos y las prerrogativas: lo más notable, si acaso, la renovación de San Lázaro, con las pretensiones foxistas de hacerse de una Cámara que lo apoye en automático y la lucha de la oposición para cerrarle el paso en esa pugna legislativa. Cronológicamente un Año Nuevo, pero políticamente todo igual: dos años perdidos y el tercero en la misma línea; tal vez, en todo caso, más nítidos los riesgos económicos, incluso en condición de detonar movimientos sociales que podrían llegar a violencias hasta ahora prefiguradas en Atenco y Cuernavaca.
PERO, POR LO pronto, el agradecimiento de este tecleador por la oportunidad de estar en contacto con ustedes a lo largo del año que cierra y el placer anticipado de compartir analíticamente el venidero. šSalud y saludos, y aquí nos rencontraremos el próximo jueves, a ver si el gobierno federal ya se enteró del problema del Canal 40!
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