Según Joskowickz, se realizaron 14 películas;
sólo tres tuvieron apoyo del Imcine
Por segundo año consecutivo sigue a la baja
la producción de cine mexicano
Con los fondos que se recauden por el nuevo cobro se
efectuarán 25 cintas
ERICKA MONTAÑO GARFIAS
La producción de cine mexicano continuó
a la baja por segundo año consecutivo, tanto en el sector privado
como en el estatal. En 2002 se produjeron 14 cintas, de las cuales sólo
tres recibieron apoyo del Instituto Mexicano de Cinematografía (Imcine)
por falta de recursos financieros, de acuerdo con datos proporcionados
por el titular de esa dependencia, Alfredo Joskowickz.
Si
bien aumentaron el número de espectadores y la presencia de cintas
mexicanas en el extranjero, no hubo recursos para financiar nuevas producciones,
lo que dio pie a buscar nuevas formas de recabar dinero. Una de ellas,
el cobro de un peso extra por boleto en taquilla, comenzará a aplicarse
el próximo 1º de enero, y se analiza otro proyecto de estímulos
fiscales para quienes inviertan en la producción de largometrajes,
esquema similar al que funciona en Brasil.
El aumento de un peso en el boleto causó descontento
entre los exhibidores, quienes en breve interpondrán un amparo contra
la medida. Al respecto, Joskowicz afirmó que "se trata de un derecho,
no de un impuesto, y esa es una diferencia radical". La Secretaría
de Hacienda, que sería la responsable de recibir el dinero y entregarlo
al Imcine, aún debe hacer el reglamento que guiará el cobro
de ese peso.
El dinero "va a ser recaudado por la Tesorería
de la Federación y luego va a ser entregado al Imcine, que lo distribuirá
entre el Fondo para la Producción Cinematográfica de Calidad
(Foprocine) y el Fondo de Estímulos al Cine (Fidecine). No se va
a emplear un solo centavo en engrosar la burocracia ni en aplicar al gasto
corriente, ni en comprar cocacolas".
De esos recursos, unos 160 millones de pesos, se destinará
50 por ciento al Foprocine y el otro 50 al Fidecine (que también
deberá recibir otros 100 millones de Hacienda). Estos recursos "servirán
para incentivar el cine mexicano, ya que la producción es el sector
más desprotegido de la industria cinematográfica, porque
es el último en recuperar la inversión. Lo que tenemos que
hacer es proteger nuestra planta productiva, a creadores y a productores
nacionales". Se prevé que con el dinero se realizarán unas
25 cintas.
En cuanto a los incentivos fiscales, Joskowicz precisó
que se trata de implementar el esquema que rige en Brasil, mediante el
cual cualquier empresa o persona puede invertir hasta 3 por ciento de su
ingreso del impuesto sobre la renta en una película y deducirlo
fiscalmente, aunque el proyecto debe ser autorizado por la Secretaría
de Hacienda.
Con apoyo del Imcine, este año se produjeron las
cintas La hija del caníbal, La tregua y Cigarros, desamores
y 20 diamantes, y se apoyó la posproducción de otras
tres: Sin ton ni Sonia, Gucha'chi y Tiempo fuera,
de acuerdo con el informe del Imcine, de apenas siete cuartillas.
Por otra parte, Joskowicz entregó al escritor Vicente
Leñero el premio que recibió en el reciente Festival de Cine
de La Habana por mejor guión, por la película El crimen
del padre Amaro, que fue candidata al Globo de Oro como mejor película
en lengua extranjera.