Revisarán si no quedan pendientes judiciales en ese país

Autoridades brasileñas dan último paso para la extradición de Trevi

DPA

Brasilia, 6 de diciembre. El Ministro brasileño de Justicia anunció hoy el último paso hacia la extradición de la cantante mexicana Gloria Trevi, acusada en su país de abuso sexual de menores.

Según la asesoría de prensa del Ministerio, el titular de la cartera, Paulo de Tarso, solicitó a la Policía Federal que verifique si existe en el país algún pendiente judicial involucrando a la artista y que designe a los agentes que quedarán responsables de su custodia hasta que sea entregada a las autoridades mexicanas.

De no haber procesos contra Gloria Trevi en la Justicia local, el gobierno autorizará en definitiva la extradición de la cantante que pasará a depender de las autoridades mexicanas, a las que se concederá un plazo de 60 días para que retiren a la artista del país.

La semana pasada, la cantante anunció al Supremo Tribunal Federal (STF) de Brasil su decisión de desistir de todos los recursos destinados a retardar su extradición, y pidió que se tomaran medidas para asegurar su regreso inmediato a México.

El miércoles, el Ministerio Público de Brasil recomendó al gobierno aceptar el pedido, y ayer el magistrado Carlos Velloso, miembro informante del proceso contra Trevi, elevó el proceso al Ministerio de Justicia y anunció que ya no existen obstáculos para que se cumpla la extradición.

El "culebrón" que rodea la extradición de la polémica artista mexicana inició el 13 de enero de 2000, cuando Gloria Trevi fue detenida en Río de Janeiro, donde vivió durante cerca de un año sin ser reconocida por nadie.

La cantante mexicana fue detenida junto con su representante, Sergio Andrade, y la corista María Raquenel Portillo, también acusados de haber sometido a abusos sexuales y sicológicos a numerosas jovencitas.

La extradición de la cantante fue concedida por el STF en diciembre de 2000, pero una serie de incidentes y recursos presentados por los abogados de la artista lograron retrasar por dos años el cumplimiento de la decisión.