El exceso de trámites y el recelo burocrático
complican la asistencia: Ana Rosa Payán
Mérida, sin ayuda del Fonden para superar los
estragos de Isidore
JENARO VILLAMIL ENVIADO
Merida, Yucatan. Tres meses después del
paso del huracán Isidore, los recursos del Fondo Nacional
para Desastres Naturales (Fonden) no han fluido en la entidad. Para la
alcaldesa de Mérida, Ana Rosa Payán, el exceso de trámites
y de recelo burocrático han complicado la llegada de los recursos
en la etapa de la recuperación. "Las reglas del fondo son muy estrictas
y municipios tan urbanos como el nuestro no pueden entrar. Nuestra insistencia
ha sido para que Fonden reconsidere en sus políticas de asignación
a municipios totalmente urbanos como el nuestro", subrayó la edil
panista.
La capital yucateca fue seriamente afectada por el huracán.
En esta ciudad cerca de 3 mil postes fueron derribados, 13 mil 300 viviendas
reportaron daños parciales o pérdida total, hubo alrededor
de 8 mil damnificados que abandonaron sus casas y se dieron casos de cerca
de 700 personas que se quedaron atrapadas en las instalaciones del Instituto
Tecnológico de Mérida. Dos personas murieron: una al electrocutarse
en la reja de su casa y otra por infarto.
"Lo que nos sucedió es que mucha gente no creyó
que caería un huracán de esta magnitud", subraya Payán,
quien gobierna Mérida por segunda ocasión. "No existía
ninguna cultura de protección civil entre nosotros. Incluso, de
nuestro catálogo de refugios, varias escuelas se inundaron y no
pudieron funcionar como tales".
"Lo
que debemos hacer ahora, después de esta experiencia, es comenzar
a generar esta cultura de protección civil. Yo propuse que en las
escuelas se comience a dar una materia específica de protección
civil. A nosotros se nos había olvidado que Mérida está
en la ruta de los huracanes. Siempre habíamos estado. Sólo
que desde el siglo XVI, según una crónica de fray Diego de
Landa, nunca había caído un huracán como éste",
argumenta Ana Rosa Payán, a quien los habitantes de esta ciudad
le reconocen un trabajo eficiente para enfrentar el desastre.
En entrevista con La Jornada, Payán hizo
un reconocimiento a la pronta ayuda de la Secretaría de Desarrollo
Social (Sedeso), que destinó 10 millones de pesos para el programa
de empleo temporal en esta ciudad; al Ejército, que ayudó
a distribuir mil 700 raciones de comida caliente entre las colonias más
afectadas, al sur de Mérida; a la Comisión Federal de Electricidad,
que restableció una buena parte de los 3 mil postes que se cayeron,
y a las organizaciones sindicales y empresariales.
Inclusive, abunda, se dieron casos como las centrales
CTM, y CROM o las organizaciones recolectoras de basura como Pamplona,
que ayudaron sin distinción de partidos. "Incluso, te puedo decir
que aquí las organizaciones y las empresas entraron mucho más
que los ciudadanos mismos".
-A nivel de comentarios y de análisis de medios
se habló mucho de ciertas divisiones y resquemores con el gobierno
estatal (encabezado por el también panista Patricio Patrón)
y el ayuntamiento de Mérida en el manejo de la emergencia. ¿Existieron
estas divisiones?
-Lo que te puedo decir es que a mí me tocó
trabajar en la ciudad con toda intensidad y las veces que hablé
con el gobernador no hubo problema en ningún sentido. Probablemente
hubo problemas de incomunicación en otros niveles. En lo general,
hubo bastante coordinación.
"Sin embargo, la falta de cultura de protección
civil nos agarró así, un tanto desprevenidos. Nosotros teníamos
alerta amarilla tres días antes del huracán. Todo indicaba
que levantaría hacia el norte. El escenario más remoto es
que bajara a la península. De pronto, en la madrugada del domingo
se topó con el frente frío del Golfo de México y vino
para acá. A Mérida le entró el huracán por
el oriente y por el poniente. Fue como una V. Por eso hay postes y árboles
que se derrumbaron de un lado y de otro".
Entre los daños que aún perduran, Payán
mencionó el hecho de que el manto freático se elevó
4 metros, lo cual ha impedido que el agua se desaloje de muchas zonas que
permanecen inundadas. Hasta el momento, se ha recolectado 85 por ciento
de los cerca de 3 mil árboles que se derribaron y en alumbrado público
hay un avance de 70 por ciento. Las zonas más marginadas de la ciudad
aún no tienen alumbrado público.
-¿Cuántas personas han sido atendidas de
las 13 mil 300 que se registraron en las mesas del Fonden?
-Nosotros repartimos como ayuntamiento 18 mil fardos de
láminas de cartón. A cada persona le repartimos de 1 a 2
láminas, según el daño, más lo que repartió
la organización Cáritas. Fonden repartió agua, láminas
y despensas, en cantidades digamos reducidas en relación con la
población afectada que teníamos, pero lo entendimos bien.
"La etapa de la recuperación ha sido la más
complicada, porque las reglas del Fonden son muy estrictas y municipios
tan urbanos como el nuestro no pueden entrar bajo esas reglas. Nuestra
insistencia ha sido para que Fonden reconsidere en sus políticas
de asignación de recursos a municipios totalmente urbanos como el
nuestro.
-Existen muchas quejas por el burocratismo del Fonden.
¿Es ahora más dinámico?
-En la etapa de la emergencia, Fonden sí es dinámico.
En los primeros días después del huracán, nos avisaban
hasta la 1 de la mañana que ahí nos mandaban 40 mil litros
de agua y toneladas de despensa. Una vez que pasó la etapa de la
emergencia, el Fonden ya no es dinámico.
-¿Qué tanto ayudó a Mérida
la solidaridad de otras regiones del país?
-Nos llegó ayuda de todos lados del país.
Hubo mucho interés de la gente de fuera. Muchísimas personas
nos hablaron. La delegación Miguel Hidalgo nos mandó inmediatamente
pipas y desazolvadoras. El gobernador de Querétaro nos mandó
un avión para fumigar, porque los mosquitos abundaban.
Ana Rosa Payán, quien acaba de ser electa para
dirigir la Asociación de Municipios de México, subraya que
por parte del sector artístico de Mérida también hubo
una solidaridad inmediata, como fue el caso de los conciertos del 12 y
13 de octubre, en los que participaron compositores reconocidos como Armando
Manzanero y cantautoras locales como Angélica Balados, quien grabó
el disco Ilumina Mérida para generar ayuda.