Boca del Rio, Ver., 4 de diciembre. A un año de haberse acordado la creación del Fondo Global de Cooperación para combatir sida, malaria y tuberculosis, al que los países desarrollados aportarían recursos para combatir esas enfermedades, apenas están disponibles 483 millones de dólares, afirmó Melanie de Boer, integrante de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Al participar en el octavo Congreso Nacional sobre Sida e Infecciones de Transmisión Sexual, la ejecutiva resaltó que las naciones desarrolladas se habían comprometido a aportar 2 mil 100 millones de dólares en el primer año, pero lo que hasta ahora se tiene apenas representa 20 por ciento de esa cantidad.

El fondo global es la propuesta de Naciones Unidas para dar una respuesta clara a esas enfermedades que afectan a la población de los países subdesarrollados, principalmente de Africa y del Caribe.

Durante el simposio De Boer explicó que los países fueron divididos en cuatro categorías y México fue clasificado en la cuarta, por lo cual no forma parte de los beneficiarios. De hecho, según explicó Patricia Uribe, directora del Centro Nacional para la Prevención y Control del Sida (Censida), el país no ha sido considerado para recibir ese apoyo económico internacional por el bajo nivel de incidencia que registra la epidemia en comparación con las zonas más afectadas.

El instrumento financiero ideado por Naciones Unidas tiene como objetivos para el próximo año canalizar recursos económicos para distribuir condones en forma masiva, establecer leyes para penalizar la discriminación hacia los grupos más vulnerables y vigilar de cerca la resistencia del VIH a los medicamentos.

A escala mundial, el fondo global busca reducir el contagio del virus causante del sida entre los jóvenes de 15 a 24 años, así como disminuir el nivel de la infección 25 por ciento en los países más afectados para 2005. Asimismo buscará bajar 20 por ciento la transmisión perinatal del VIH y fijar las normas para prescribir las terapias médicas antirretrovirales.

Durante el foro quedó de manifiesto que los gobiernos del primer mundo no están haciendo lo suficiente para enfrentar al sida, por lo que además de la propuesta del fondo global se tiene que dar cabida a nuevas iniciativas provenientes de organizaciones civiles y ampliar el acceso a medicamentos con un costo razonable. ANGELES CRUZ, ENVIADA, Y ANDRES MORALES, CORRESPONSAL