Continúa envuelta en la polémica
su exposición de cadáveres plastinados
Von Hagens rescata la tradición de practicar
una autopsia en público
En la capital británica, cerca de 650 personas
pagaron para presenciar la intervención
La muestra que se exhibe desde marzo, en Londres, registra
más de 600 mil visitantes
ALIA LIRA HARTMANN CORRESPONSAL
Berlin, 22 de noviembre. Para Gunther von Hagens
los escándalos son ya parte de su vida cotidiana. La muestra Mundos
corporales, en la que se exhiben cadáveres y secciones del cuerpo
conservados bajo la técnica inventada por este anatomista alemán,
denominada plastinación, ha dado la vuelta por varias ciudades
europeas ro-deada por la polémica.
En
Londres se presenta desde el pasado marzo y las fechas han sido extendidas
ya en dos ocasiones por la afluencia de más de 600 mil visitantes.
Lo único que ahora faltaba era ver a Von Hagens en plena acción,
y de eso fueron testigos, en la capital británica, cerca de 650
personas que lograron comprar su boleto para la autopsia pública
que el médico realizó hace dos días.
Durante el siglo XVI las autopsias eran espectáculos
públicos, y precisamente en Londres se llevó a cabo la que
se consideraba la última, en 1830.
Convencido de estar en camino de rescatar una vieja tradición,
el cuerpo de un adulto alemán reportado como alcohólico,
de 72 años, fue objeto de la intervención de Von Hagens,
quién aclaró que los objetivos de la autopsia seguían
siendo profesionales, es decir, establecer la causa de la muerte y la búsqueda
de anormalidades en el cuerpo del donante, aunque también aseguró
que este trabajo lo hace generalmente con un poco más de paciencia.
Inseparable sombrero negro
La
autopsia se transmitió en vivo por un canal londinense de televisión.
El médico aclaraba en voz alta los detalles mientras extraía
corazón, pulmones, hígado y cerebro para mostrarlos de cerca
al público. Las reacciones apuntaban a definir el ''espectáculo"
como fascinante, aunque las cámaras televisivas mostraban a una
jóven espectadora temblando de manera incontrolable y a otra que
prefería taparse los ojos a medias.
En algún momento de la autopsia una persona inquirió
a Von Hagens, a quien se etiqueta como Dr. Frankestein, a quitarse el inseparable
sombrero negro que porta en sus apariciones públicas, como una señal
de respeto ante el cadáver. El anatomista respondió, sin
mostrarse ofendido: ''No me lo quito como respeto a la gente a la cual
me siento pertenecer", en alusión a la reproducción de un
cuadro de Rembrandt, Lección de anatomía del Dr. Nicoles
Tulp (1632), en el que se observa al galeno portando también
un sombrero negro mientras realiza la intervención.
Mundos corporales podría presentarse en
México, después de recorrer algunas ciudades de Estados Unidos
en 2004 y 2005, si es aceptada la propuesta que la Fundación Televisa
envió al Instituto de Plastinación de Heidelberg.