El próximo viernes presentará su proyecto de gasto

Desarrollo social y seguridad serán prioridades en 2003: López Obrador

ELIA BALTAZAR

El gobierno capitalino destinará el próximo año mayores recursos para desarrollo social y seguridad pública, de acuerdo con el proyecto de presupuesto que presentará a la Asamblea Legislativa.

Así lo informó ayer el jefe de Gobierno del Distrito Federal, Andrés Manuel López Obrador, quien anunció que el próximo viernes hará pública su propuesta de gasto para 2003, en el que mantendrán la prioridad los programas sociales y de combate a la inseguridad.

López Obrador adelantó también que se mantendrá el programa de austeridad e inclusive se prevén recortes en el gasto corriente administrativo, particularmente en el caso de la jefatura de Gobierno. Y, a pesar de las restricciones económicas en el país, se comprometió a sostener su política salarial y otorgar aumentos a los trabajadores de la ciudad por encima del índice de inflación.

En su conferencia de prensa matutina, el mandatario expresó que "en lo general la prioridad del gobierno local está en el desarrollo social, en todo lo que tiene que ver con salud, educación y vivienda".

A esas áreas, agregó, la administración local destinará la mayor parte de los recursos de que disponga el próximo año. Además, aunque adelantó que habrá recortes en el gasto corriente administrativo, subrayó que por tercer año consecutivo se otorgarán aumentos salariales de dos puntos por encima de la inflación a los trabajadores de la administración capitalina.

El combate a la corrupción seguirá siendo también prioridad de las autoridades locales, dijo López Obrador, pues la meta es acabar con aquellas viejas prácticas que hicieron del gobierno "el puerquito" del cual todo el mundo sacaba provecho.

Informó, por ejemplo, que a partir del caso del predio de la Escuela Nacional de Antropología e Historia, por el que un particular reclamó una indemnización de 130 millones de pesos, pidió a su equipo de gobierno revisar todos los asuntos en que se reclama algún pago por parte de la administración.

López Obrador reiteró que deben quedar atrás aquellos tiempos en que el gobierno estaba organizado para hacer negocios particulares y "saquear el erario", porque cualquiera vendía "ideas brillantes" a la administración, aunque no sirvieran para nada.

Así, se adquirieron cosas inservibles, que terminaron en las bodegas y que se compraron sólo porque los proveedores contaban con amigos o influencias dentro del gobierno, señaló López Obrador. "El gobierno era una fábrica de ricos y cualquiera se llevaba su dinero, ya fuera en compras o en juicios". Ahora, sin embargo, eso se acabó. Y por esa razón "están molestos algunos políticos y diputados, quienes pretendían llevar con el gobierno una relación a partir de favores y a quienes mandamos al diablo", agregó.

Enfatizó que no sólo la política de austeridad, sino la de combate a la corrupción, ha permitido importantes ahorros en la administración capitalina, que sólo en materia de compras redujo gastos en más de 2 mil millones de pesos del año 2000 a la fecha. Precisó que en la reciente licitación para la compra de vales de despensa para los trabajadores, por aproximadamente mil 500 millones de pesos, habrá un ahorro de entre 18 y 20 por ciento respecto del año anterior. "Pero no hay mordida de por medio ni influyentismo".

En la visita que realizó a la preparatoria Lázaro Cárdenas, en la delegación Alvaro Obregón, el jefe de Gobierno ratificó el compromiso de su administración con la educación pública y gratuita, pero de calidad, para la gente de menos recursos. "Queremos que la educación esté al alcance de todos y que no se convierta en un privilegio, sino que se garantice como un derecho, tal como se asienta en la Constitución", dijo.