Jornada mundial de esa disciplina en el Claustro de Sor Juana

Vinculación del saber filosófico con los procesos culturales e históricos

RENATO RAVELO

La filosofía hoy tiene un trabajo cada vez más ubicuo, porque en lugar de relacionarse con las verdades perennes, lo hace con los procesos culturales e históricos, señaló Fabián Jiménez, director de la carrera sobre esa disciplina en el Claustro de Sor Juana, durante las actividades del Día Internacional de la Filosofía, que por vez primera se celebra mediante acuerdo con la UNESCO.

Para Jiménez Gatto, ''a pesar de todas las crisis por las que pasó en el siglo XX, la filosofía es un saber que cada vez tiene más importancia, para contrarrestar cierta deshumanización del sistema, que para poder funcionar requiere de un complejo mecanismo, cuyo imperativo es la simplicidad. En cambio, lo que se hace necesario en un mundo cada vez más simplificado es la complejidad del pensamiento filosófico para hacer preguntas que no se limiten al blanco y negro".

Con actividades todo el día, los estudiantes de ese claustro dieron a conocer sus investigaciones, sus avances, desde diversos enfoques, que recuperaron lo mismo relaciones entre la idea del tiempo en Heidegger y su relación con El perseguidor, de Julio Cortázar, o las aportaciones de Roland Barthes por medio de Yasunari Kawabata.

El enfoque actual de la carrera, explica Jiménez Gatto, ''tiene que ver con una formación muy sólida en historia de la filosofía, pero también con una preocupación muy especial por lo que sucedió en el siglo XX. La formación oscila entre la historia y el presente, con un aspecto práctico vinculado a la dinámica cultural, pues a partir del siglo que terminó la filosofía entró en un diálogo intenso con los problemas sociales".

Búsqueda de grandes verdades

El interés por enfocar hacia la cultura los estudios en el claustro se demostró con la reciente inauguración de la maestría en cultura virreinal, para profundizar en ''el estudio y la promoción del conocimiento de la vida y la obra de Sor Juana, en particular, y del mundo novohispano en general. La imparten especialistas como Elías Trabulse, José Pascual Buxó, Margo Glantz, María Eugenia Agueda, Sara Poot, Manuel Ramos y Antonio Rubial.

Programada en cuatro semestres que se iniciaron el 23 de septiembre, la primera maestría de su género aborda lo mismo la historia de España, la de la literatura del Siglo de Oro, que el desarrollo novohispano.

Para el director del Colegio de Filosofía del claustro, ''ésta se acerca cada vez más al aspecto de la identidad que a un conocimiento perenne. Tiene mucho más que ver con una identidad que siempre es compleja, que se reconstruye.

''Así, a la filosofía se le ha ubicado como la búsqueda de las grandes verdades que no cambian. Parecería que la filosofía contemporánea lo que ha empezado a descubrir es el carácter profundamente histórico de nuestra realidad e identidad. Si bien se revisan los grandes pensadores de la metafísica, de la ontología, Platón, Aristóteles, Hegel, investigamos también ese carácter enraizado de la filosofía en la actualidad."

Respecto de la labor actual de los filósofos, Jiménez Gatto sostuvo que ''si el trabajo que salta a la vista es la docencia e investigación, cada día más se requiere de filósofos en diferentes ámbitos de la cultura, en organismos no gubernamentales".

Se trata, explicó, ''de un trabajo cada vez más ubicuo, y la filosofía aparece en ámbitos en los que antes no estaba, porque existe la necesidad de las humanidades en un mundo cada vez más tecnificado.

''Tenemos enormes desarrollos en el ámbito de la ciencia y la tecnología, pero los humanistas, los filósofos, aportan a la sociedad el valor de lo humano."