ENTREVISTA /ARNALDO
OTEGI, DIRIGENTE INDEPENDENTISTA VASCO
Las ideas de la izquierda nacionalista siguen abriéndose
camino
Ante la pretensión del Estado español
de borrar del mapa a la izquierda nacionalista de cara a las próximas
elecciones, el dirigente y parlamentario independentista se muestra convencido
de que "el pueblo vasco puede ganar esa batalla".
GARA
Donostia. A punto de cumplirse tres meses desde
que se suspendieran las actividades de Batasuna, Arnaldo Otegi atestigua
que la izquierda abertzale (nacionalista) se está moviendo
"en un escenario muy especial. Pero cabe recordar que la izquierda abertzale
no son ni una ni varias siglas, sino un proyecto político. Durante
40 años, la izquierda abertzale ha sembrado en el terreno
social de este país las ideas de su proyecto político que,
estamos convencidos, interesa objetivamente a la mayoría popular
de Euskal Herria. El Estado está intentando sabotear las estructuras
de la izquierda abertzale, pero sus ideas se siguen abriendo camino
en este país".
-Hay analistas políticos que aseguran que están
ustedes noqueados...
-Los anuncios de la derrota definitiva de la izquierda
abertzale no son cosa de ahora. Todos los gobiernos han tenido esa
pretensión aniquiladora. Pero los ministros del Interior han pasado
y la izquierda abertzale sigue y, además, con una capacidad
de propuesta y de alternativa que hace que hoy se pueda decir que el debate
en este país gira en torno a los contenidos que la izquierda abertzale
ha defendido históricamente: Euskal Herria, autodeterminación,
referéndum... La izquierda abertzale ha logrado derrotar
la estrategia de asimilación del pueblo vasco y los gobiernos español
y francés tienen hoy un gran problema.
-Les achacan falta de capacidad para ofrecer alternativas
creíbles a la sociedad, por ejemplo ante el proyecto que ha hecho
Ibarretxe.
-Cuando
el debate del Estatuto, se decía exactamente lo mismo. El pueblo
vasco tiene ahora datos objetivos para hacer un balance. El PNV ha tardado
25 años en empezar a decir lo que entonces dijo la izquierda abertzale.
Si se hace el recorrido histórico del PNV en este tiempo se observará
que han ofrecido siempre propuestas muy creíbles, como la necesidad
imperiosa de que este país tuviera centrales nucleares y de que
formara parte de la OTAN o la afirmación de que el Estatuto iba
a resolver los problemas de Euskal Herria. Por contra, la izquierda abertzale
ha presentado siempre propuestas constructivas que buscan resolver
el problema estructural, que es que este país no tiene capacidad
de decisión y sus decisiones no son respetadas. Este mismo año
hemos hecho públicas dos propuestas factibles: una para un escenario
de paz estable y duradero y otra para la construcción de un marco
democrático.
-¿Cuál es su análisis sobre el plan
de Ibarretxe?
-El PNV está necesitado de este discurso porque
hoy no es posible hacer un discurso abertzale creíble si
no se incorporan los términos políticos que hemos defendido
durante 25 años. No hay propuesta creíble si no se habla
de los siete territorios, de la autodeterminación, de la soberanía,
de la consulta popular y del respeto a la identidad nacional del pueblo
vasco. Eso lo ha conseguido la izquierda abertzale con su trabajo.
-Deberían estar contentos...
-El problema es que el PNV no incorpora esos términos
a su propuesta para resolver el conflicto, sino para volver a plan- tear
un fraude político como en 1977. No quiere un acuerdo abertzale
democrático y popular, ni hablar con el Estado de nación
a nación. Busca consolidar su poder político en tres territorios.
La propuesta de Ibarretxe, además de no buscar resolver el conflicto,
es absolutamente disgregadora. Plantea que los demás nos incorporemos
al proyecto político del PNV. La propuesta no busca sumar, sino
la batalla contra la izquierda abertzale. ¿Dónde sitúan
el enemigo los voceros de Lakua en sus declaraciones? En la izquierda abertzale
y no en el gobierno español.
-¿Qué ofrece la izquierda abertzale en
este contexto?
-Hay que hacer una propuesta que resuelva el problema
estructural de este país, que resuelva el conflicto y que permita
un proceso democrático en el que todos los agentes del conjunto
de Euskal Herria puedan participar libremente. No hay que hacerlo sobre
proyectos, como hace Ibarretxe, sino sobre condiciones democráticas
y sobre derechos. Ese es un terreno de juego para todos, no sólo
para los abertzales. Todo el mundo tiene que acatar lo que en ese
proceso acuerden las fuerzas políticas, sindicales y sociales y
eso debe ser refrendado por el conjunto de la ciudadanía de Euskal
Herria.
-En mayo se celebrarán elecciones municipales y
forales.
-Estas no son unas elecciones normales. No nos jugamos
si los ayuntamientos o las diputaciones se gestionan desde la derecha o
desde la izquierda. Estas son unas elecciones muy especiales porque el
Estado ha decidido que Batasuna no participe. Esto, que es una dificultad
objetiva, hace que también sean unas elecciones llenas de oportunidades
para que en lugar de que cada estructura política entre a la guerra
partidaria, hagamos una apuesta como pueblo. Que sea el pueblo vasco el
que se presente a las elecciones para derrotar al Estado.
-Pero, ¿qué hará la izquierda abertzale?
-Que nadie tenga la menor duda de que las ideas de la
izquierda abertzale estarán presentes en estas elecciones.
-¿Cómo?
-Como la expresión estructurada de un sentimiento
popular que está abogando por el cambio político, por la
paz, por la independencia y por la izquierda en este país. La izquierda
nacionalista lleva muchos años sembrando con determinación
y honradez. Nosotros, que como estructura política no podemos comparecer
a esas elecciones, desde un análisis de izquierda de la realidad
social, confiamos en que los sectores que están de acuerdo con ese
proyecto serán capaces de articular los mecanismos necesarios para
que esas ideas estén presentes en estas elecciones.
-¿En qué posición ven al PNV?
-El papel del PNV es sobrevivir gestionando el enfrentamiento
con el Estado. Eso le lleva la mayoría de las veces a compartir
estrategia con el Estado y en un determinado momento le arrastró
a hacer una alianza con la izquierda abertzale. Hoy el PNV trata
de desnaturalizar el conflicto, para seguir otras dos décadas gestionando
las tres provincias e intentar lograr la hegemonía abertzale.
-Parecen surgir pequeñas discrepancias entre PP
y PSOE...
-El PSOE está recogiendo las sobras del PP. Pero
si uno lee con atención algunos detalles se ve que el PSOE vuelve
a ser una alternativa de gobierno creíble en el Estado español.
Si Pedro J. Ramírez (director general de El Mundo) ha invitado
a José Luis Rodríguez Zapatero a cenar a su casa no es porque
se sienta a gusto sino porque quien controla los medios económicos
de El Mundo le ha dicho que es mejor llevarse bien con él.
En cuanto a la capacidad del PSOE de encarar la resolución del conflicto
vasco en otros términos, somos pesimistas, aunque sí que
tímidamente se van alzando algunas voces que apuntan más
en la dirección de resolver el conflicto en términos democráticos.