La Casa Blanca se niega a aceptar inspecciones
Se reúnen países firmantes de la Convención sobre armas biológicas
AFP Y DPA
Ginebra, 11 de noviembre. Los 146 países firmantes de la Convención sobre armas biológicas de la ONU iniciaron este lunes una reunión para tratar de salir del callejón sin salida en que están las negociaciones destinadas a fortalecer la prohibición de este tipo de armamento firmada en 1972.
La conferencia fue suspendida en diciembre pasado por las diferencias entre Estados Unidos, que se niega a aceptar inspecciones, y los demás países.
Esta nueva sesión fue inaugurada por el presidente de la conferencia, el embajador húngaro Tibor Toth, quien propuso a los países miembros un proyecto de declaración que prevé nuevas reuniones anuales para examinar en especial las medidas nacionales de control de los arsenales biológicos antes de la nueva sesión ordinaria de la conferencia, prevista para 2006.
Pero este texto, que debe ser adoptado por consenso, no contempla de manera explícita dotar a la convención de un sistema de verificación internacional y obligatoria, de lo que carece pese a siete años de negociaciones.
Hace un año, la conferencia había aplazado sus trabajos en Ginebra cuando Estados Unidos se opuso a toda inspección obligatoria e independiente de sus laboratorios de biotecnología, aduciendo que seis países firmantes de la Convención (Corea del Norte, Irak, Irán, Libia, Sudán, Siria) continúan con la producción de armas biológicas. La Convención prohíbe la fabricación y almacenamiento de tales armas.
Expertos y organizaciones no gubernamentales subrayan que la adopción de un sistema de verificación con credibilidad es mucho más necesario ahora debido a los progresos rápidos de la biotecnología y el resurgimiento de las amenazas bacteriológicas, así como por los ataques con antrax en Estados Unidos y las acusaciones actuales en Irak.