Llegará el secretario general de la OEA para mediar

Rechaza el ejército de Venezuela llamado a la desobediencia civil

AFP, DPA, PL Y REUTERS

Caracas, 23 de octubre. El alto mando del ejército de Venezuela rechazó este miércoles el llamado a la desobediencia civil y militar hecha la víspera por un grupo de oficiales golpistas, y puntualizó que a la institución militar no pueden socavarla ni confundirla "desesperados llamados a quebrantar la norma constitucional".

Los 14 oficiales que llamaron a la insurrección se encontraban aislados en la plaza Altamira y no lograron el apoyo que buscaban en los cuarteles del país, pero fueron respaldados por los partidos tradicionales opositores y la cúpula empresarial Fedecámaras y la Confederación de Trabajadores de Venezuela (CTV).

En el plano internacional, se anunció el arribo a esta capital para el domingo del secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), César Gaviria, para seguir en labores de acercamiento en un diálogo entre gobierno y oposición.

A su vez, Estados Unidos abogó por una solución "constitucional, democrática y pacífica" a la crisis venezolana, y urgió al gobierno y al pueblo a impulsar iniciativas urgentes "exitosas", pero se abstuvo de su-marse a la condena que hizo Gaviria ayer de la insurrección de un grupo de militares investigados por el golpe de abril pasado.

"La situación en las diferentes guarniciones y unidades militares es de total normalidad", señaló en un comunicado el ejército firmado por el comandante de la rama, general Julio García Montoya.

Criticó a "compañeros de armas que se han desviado del respeto de la norma y no han tenido eco en nuestra institución", e invitó a la ciudadanía a no ceder a los llamados a "quebrantar o incurrir en actitudes o acciones contrarias al estado de derecho".

Asimismo, reafirmó el apego de las fuerzas armadas a la "defensa de la democracia" y aseguró que "permanecerán vigilantes a cualquier intento por atentar contra ella".

Mientras, grupos de partidarios del go-bierno de Hugo Chávez iniciaron concentraciones en torno al palacio presidencial en respaldo del gobierno constitucional; a su vez, el vicepresidente José Vicente Rangel señaló que el país "amaneció en total calma" y "en estado de absoluta normalidad en todas las guarniciones militares".

Los militares golpistas, que resultaron absueltos por la justicia, al frente del general Enrique Medina Gómez pasaron su primera noche atrincherados en la plaza Altamira de una exclusiva zona del este caraqueño, acompañados por unos 500 civiles. La víspera, el gobierno los calificó de "payasos" y "fracasados".

El canciller venezolano, Roy Chardeton, al descalificar a los oficiales que se declararon en "rebeldía" aseveró que su llamado a la desobediencia no representa el pensamiento de los militares venezolanos. Apuntó que la OEA ratificó "con nombre y apellido su respaldo a la democracia venezolana y la legitimidad del presidente Chávez".

La opositora Coordinadora Democrática, que congrega a los partidos opositores, así como Fedecámaras y la CTV, se sumaron de inmediato al llamado a la insurrección hecho por oficiales disidentes.

Además, rechazaron que se les califique de "golpistas", y dijeron que quieren decirle a la OEA que pugnan por nuevas elecciones como salida constitucional a la crisis.

Perú, por su parte, expresó su preocupación por la crisis en Venezuela y Bolivia, y lamentó la "actitud insurreccional" de oficiales disidentes.