El militar retirado demanda calma a los mercados

Gutiérrez y Noboa buscan alianzas para la segunda vuelta en Ecuador

DPA, AFP, REUTERS Y PL

Quito, 21 de octubre. En lo que fue interpretado hoy como una marcada polarización en Ecuador y un rechazo a los partidos tradicionales, el coronel retirado Lucio Gutiérrez, que cuenta con el apoyo de los sectores sindicales e indígenas, y el magnate bananero Alvaro Noboa disputarán la presidencia el 24 de noviembre para la presidencia de Ecuador, luego de haber quedado finalistas en la primera vuelta celebrada el domingo. Ambos buscan alianzas para la segunda ronda.

El analista y ex canciller Benjamín Ortiz advirtió que "vienen días difíciles para Ecuador con un populismo de derecha y otro de izquierda". Pero "si Ecuador ha cambiado de actores en las figuras políticas presidenciales, no ha cambiado de actores en el Congreso, donde serán las grandes fuerzas tradicionales las que van a estar. Buscarán alianzas (Gutiérrez y Noboa) pero no serán suficientes para controlar el Legislativo", añadió.

A su vez, el analista Santiago Nieto expresó: "a ninguno de los dos candidatos le conviene tener pactos con la clase política tradicional".

La sorpresa de la víspera la constituyó Gutiérrez, toda vez que ningún sondeo le daba oportunidad para llegar en el primer lugar, con 20.2 por ciento de los votos que finalmente obtuvo, si bien le otorgaban un empate técnico junto con cuatro de los 11 candidatos.

Además, el coronel retirado, de 45 años, se convirtió en el primer finalista de una elección presidencial desde 1979 que no cuenta con el aval de uno de los partidos históricos. Este lunes anunció que ya inició contactos con los diferentes partidos políticos en busca de un acuerdo que propicie la gobernabilidad.

Gutiérrez, surgió en enero de 2000 al apoyar una rebelión indígena que derrocó al presidente Jamil Mahuad; y fundó un movimiento independiente para participar en las elecciones, el denominado Movimiento Sociedad Patriótica 21 de Enero, por la fecha en que se inició la rebelión.

El militar retirado, a quien algunos llaman el Hugo Chávez de Ecuador al comparar su rebelión con el fallido golpe de aquél contra el presidente Carlos Andrés Pérez, en 1992, marcó sin embargo distancia con el actual mandatario venezolano.

"Son dos realidades diferentes. Aquí en Ecuador realizamos nuestro proceso de transformación. Un proceso que tendrá que ser en consenso", declaró anoche Gutiérrez, quien hizo su campaña vestido de uniforme verde oliva y con un discurso sencillo.

No obstante, el militar retirado, que mantiene un discurso contra la corrupción y contra los partidos políticos tradicionales, manifestó respetar y admirar al presidente venezolano.

Asimismo, indicó que de ganar la segunda ronda, Ecuador tendrá estabilidad política y económica, y aunque reconoce que hay temores por su eventual ascenso a la presidencia, llamó a la calma a los mercados al prometer que pagará la deuda externa si llega al poder, pero que buscará renegociarla.

De hecho, no sólo un eventual ascenso del izquierdista Gutiérrez, sino del derechista Noboa, causa incertidumbre. Según operadores de Wall Street, hay la misma preocupación de que la elección presidencial de Ecuador sea definida entre un militar ex golpista y un empresario sin experiencia, pues podrían poner en peligro la recuperación económica del país.

Noboa, de 51 años, que se postuló por el Partido Renovador Institucional Acción Nacional (PRIAN) y es considerado el hombre más rico del país, obtuvo 17.4 de los votos, escrutadas 95 por ciento de las mesas de electorales, también comenzó ya a forjar alianzas políticas y sociales.

Tras conocer los resultados anoche, declaró, en alusión a Gutiérrez, que "el pueblo va a tener que escoger si quiere un gobierno comunista como el de Fidel Castro o un gobierno de empresas privadas, de empleo y de reactivación económica, que es lo que yo propongo".

Noboa, quien no tiene ningún vínculo familiar con el actual mandatario, Gustavo Noboa, aseguró que aprovechará su amistad con la clan estadunidense de los Kennedy para atraer al país inversiones y empleos en caso de llegar a la primera magistratura.

El hecho de que tanto Gutiérrez como Noboa hayan surgido como finalistas para competir el 24 de noviembre causó sorpresa, si bien el dirigente sindical Fausto Durán consideró que esto "es una demostración de que el pueblo ya no acepta la partidocracia o los partidos tradicionales que se han intercambiado el poder, responsables de la corrupción que ha destruido a Ecuador".