Pancho Rodríguez, la revelación; Barry Bonds, el jonronero
Finalistas de la gran carpa afinan sus armas secretas
AFP
Los Angeles, 18 de octubre. Angelinos de Anaheim, al mando de Mike Scioscia, tiene alistadas sus armas para tratar de salir adelante en esta serie, así que el mánager ha dado especial relevancia a su cuerpo de relevistas, que lo ha sacado de más de un problema en la campaña regular y en los playoffs.
Anaheim cuenta con el veterano corredor Troy Percival, quien estuvo muy efectivo en la postemporada ante Nueva York y Minnesota, y con el novato venezolano Francisco Rodríguez, la revelación de la última parte del campeonato.
Con sólo 20 años de edad, el joven de Caracas es el arma secreta de Anaheim. Los técnicos de San Francisco revelaron no tener muchos datos de Pancho Ramírez, a quien apenas prestaron atención cuando les lanzó un par de veces durante la campaña.
K-Road, como lo bautizó la prensa estadunidense por sus repetidos ponches, se echó encima el peso de relevista intermedio y consiguió triunfos a puro coraje, inteligencia y habilidades. Con una recta que le camina hasta 95 millas por hora y un venenoso slider, el venezolano enfrió a los bates más encumbrados de Yanquis y Mellizos.
Otro elemento de Angelinos es el balanceado ataque de su alineación abridora. Adam Kennedy, Darren Erstad, Scott Spiezig, Garret Anderson, Troy Glaus y Tim Salom, que han jugado sólido a lo largo de la campaña y en postemporada conectaron oportunamente.
La primera y más poderosa razón de Gigantes es el toletero Barry Bonds, terror de los lanzadores en todos los estadios. Bonds tiene tanto poder que conecta jonrones por todos lados del terreno.
Su segunda arma es el puertorriqueño Benito Santiago, quien cumplió a cabalidad su papel de proteger a Bonds en la alineación. Pero además de su poderoso bateo, Santiago ha resultado efectivo a la defensiva, y es una de las razones por la que el pitcheo de Gigantes tiene un bajo promedio de 3.54 carreras limpias por juego.
El sólido cuerpo de lanzadores es el tercer elemento a favor de San Francisco. Ross Ortiz, Kirk Rueter, Jason Schmidt, Livan Hernández y Ryan Jensen han sido abridores consistentes en la temporada.
Gigantes cuenta además con el cerrador Robb Men, campeón con Marlines de Florida, quien a sus 32 años se ha convertido en el lanzador más joven en llegar a 300 juegos salvados.