Desaloja Estados Unidos su embajada en Yakarta
Refuerzan medidas de seguridad en tres centrales eléctricas
indonesias
AFP, DPA Y REUTERS
Yakarta, 18 de octubre. El gobierno indonesio promulgó
hoy dos decretos para la lucha antiterrorista tras los atentados del sábado
anerior en la isla turística de Bali, al tiempo que fueron reforzadas
las medidas de seguridad en torno a tres centrales eléctricas vitales
en la isla de Java ante nuevas amenazas.
De su lado, Australia reafirmó sus temores sobre
nuevos atentados en el sudeste asiático. También Estados
Unidos advirtió sobre el riesgo de violencia y ataques terroristas,
y comenzó el desalojo de su embajada en Yakarta de 350 diplomáticos
y sus familias ante amenazas "creíbles".
A
la par que se daban a conocer los decretos mediante los cuales se estableció
el estado de emergencia en todo el país, la policía citó
a declarar al controvertido líder religioso musulmán Abu
Bakar Baashir, quien tuvo que ser hospitalizado en la provincia central
de Java al sufrir problemas de salud.
Baashir, clérigo de 64 años a quien se atribuye
el liderazgo de Jemaah Islamiyah, or-ganización musulmana a la que
se vincula con Al Qaeda, reiteró hoy su inocencia, calificó
de "falsas" las acusaciones e insistió en que si hay indicios, entonces
que se prueben.
La policía nacional de Indonesia dijo que se citó
a declarar a Baashir para este sábado, pero negó que exista
orden de detención. Al parecer, la decisión de interrogarlo
se debe a la aparición de nuevas informaciones que tenderían
a vincular al religioso con un re-presentante de Al Qaeda en este país.
El clérigo, que había anunciado que se presentaría
ante la policía de Yakarta a declarar, sufrió sin embargo
un desmayo y fue hospitalizado en Java central, donde un médico
hizo saber que estaría en reposo cinco días.
El primer decreto, cuyos documentos fueron firmados por
la presidenta Magawati Sukarnoputri durante una reunión ministerial,
trata sobre las medidas antiterroristas, mientras que el segundo permite
la aplicación retroactiva de estas medidas en relación con
los cruentos sucesos de Bali, que dejaron casi 200 muertos y más
de 300 heridos.
Los ministros de Justicia, Yusril Ihza Ma-hendra, y de
Seguridad, Susilo Bambang Yudhoyano, al dar a conocer las medidas coincidieron
en que ahora se tiene una nueva autoridad para proceder, y se establece
que los culpables de actos terroristas pueden ser castigados con la pena
de muerte.
Con las nuevas normas las autoridades po-drán investigar,
interrogar y perseguir judicialmente a quienes perpetraron los atentados
de Bali. Además, les permitirán crear un organismo antiterrorista
que carecerá de autoridad para realizar decisiones unilaterales.
Pese a que varias personas han sido interrogadas, la policía
no ha podido aclarar los sucesos, pero mantiene la hipótesis de
que una red terrorista vinculada a Al Qaeda, de Osama Bin Laden, estaría
implicada.
En las últimas horas la policía indonesia
reforzó la seguridad en las centrales elécricas de Suralaya
y Saguling, en el oeste de Java, así como en el norte de Yakarta.
Una fuente de seguridad dijo que "nuestros policías
están en estado de alerta de alto nivel", pues ya antes se había
advertido que el sector energético podría ser el objetivo
de futuros ataques terroristas.
Australia, que viene ofreciendo un millón de dólares
de recompensa, fue objeto este día de la solidaridad del presidente
George W. Bush, pues ha sufrido entre 119 y 140 víctimas, y por
ello envió al gobierno, otro aliado en la lucha antiterrorista,
sus condolencias por las "pérdidas de muchas vidas".
El primer ministro australiano, John Ho-ward, quien visitó
Bali y elogió el trabajo conjunto con las autoridades indonesias
en torno a este caso, reiteró que es "muy probable" que se produzcan
otros atentados en la región, luego de que ayer y hoy tuvieron lugar
nuevos bombazos en Filipinas.
También el primer ministro de Malasia, Mahathir
Mohammad, expresó en Nueva Delhi que su país podría
sufrir ataques como los ocurridos en Indonesia y Filipinas, e indicó
que ya ha tomado medidas, pero que nunca se sabe dónde será
el siguiente golpe de este tipo de actividades terroristas.