Unos cien mil menores de zonas marginadas no reciben desayuno escolar
En el DF casi un millón de niños padecen desnutrición o anemia: DIF
Prioritario aumentar la cobertura, dice la titular en el Día Mundial de la Alimentación
RICARDO OLAYO GUADARRAMA
En el Distrito Federal 187 mil niños menores de cinco años padecen desnutrición y 775 mil anemia, indicó la directora del DIF-DF, Martha Pérez Bejarano, al conmemorar el Día Mundial de la Alimentación, en Iztapalapa.
Dijo que las cifras son resultado de una encuesta federal de salud pública y revelan que es necesario replantear la política económica. La funcionaria indicó que la institución capitalina atiende con desayunos escolares a más de 630 mil alumnos de zonas de alta marginalidad, pero quedan al menos 100 mil sin cobertura.
En la ciudad de México hay un millón 300 mil alumnos de educación prescolar y primaria que son objetivo del DIF capitalino para apoyarlos en su proceso de crecimiento, afirmó. Sin duda uno de los factores que ayudan a enfrentar el problema, dijo Pérez Bejarano, es el de los recursos económicos, por lo que será importante tener presupuesto para aumentar la cobertura.
Debe quedar claro, señaló en entrevista, que el presupuesto no es para contratar personal o crecer, sino para el desayuno escolar, pues "queremos garantizarlo al ciento por ciento de la población escolar".
De acuerdo con un estudio, hace falta dar desayuno a 100 mil alumnos, dijo. Primero se atiende a la población más vulnerable, pero luego se avanzará para cubrir a ciento por ciento de la población que lo requiere, comentó.
La institución aplica además el programa de cocinas populares, a las que se dan 5 mil despensas cada mes. Ayer, durante el Día Mundial de la Alimentación, las mujeres participantes en el programa recibieron reconocimientos y vendieron sus productos en la explanada de la delegación Iztapalapa.
El problema no se debe circunscribir al presupuesto, precisó, "pues hace falta un cambio en la política pública federal y eso no depende de recursos". Por esta vía se puede acabar con la desigualdad social, que es la base de la problemática.
Hay otros factores que pueden ayudar a mejorar la alimentación, agregó: la cultura de la población, y los programas de orientación alimentaria. Esto "no tiene que ver con recursos presupuestales sino con la corresponsabilidad ciudadana para hacer un buen uso de la alimentación".
Desafortunadamente las familias han sustituido los buenos alimentos "por productos chatarra. En algunos casos "mejor compran la Coca-Cola que la leche".