Asociación privada tiene un amparo vigente hasta 2006
El GDF, impedido de recuperar el terreno que ocupa el Centro Hípico
RICARDO OLAYO GUADARRAMA
Es mediodía en la tercera sección del bosque de Chapultepec. En más de seis hectáreas de terreno de propiedad pública se observa una febril actividad. Aquí hay 280 caballos, cuyos dueños son hombres de dinero. En la pista de salto los jinetes cabalgan con riguroso casco, mientras los caballerangos lavan a chorro de agua y peinan a los animales.
Es el Centro Hípico de la ciudad de México, donde los socios de la agrupación privada disfrutan del lugar contra la voluntad del Gobierno del Distrito Federal (GDF), que perdió en tribunales la revocación del permiso que fue ampliado por el entonces regente Oscar Espinosa Villarreal, en octubre de 1996. Un amparo les autoriza a seguir usando el bien público hasta 2006 sin problema alguno, según el vicepresidente de la asociación, Javier Traver Navarro.
En esta carrera parejera los socios sacan un cuerpo de ventaja al gobierno central, aunque el delegado de Miguel Hidalgo, Arne aus den Ruthen Haag, confía en que se revoque el permiso y entonces se cumpla el dicho: caballo que alcanza gana.
El próximo año el Centro Hípico cumplirá 30 años. De este lugar ya se fueron los hermanos Carlos, Raúl y Enrique Salinas de Gortari; Carlos Peralta, que emigró a Pastejé, a un extenso terreno de su propiedad, los O'Farril y muchos otros. Aparentemente sólo queda Antonio Chedraui, de los socios que construyeron las casi 300 caballerizas. Pero hay muchos otros, cuyos nombres no se pueden difundir, "por privacía", explica Traver.
Para el vicepresidente de la asociación todo está en regla. Según lo pactado en el permiso del GDF, cada mes entregan a la Tesorería capitalina 280 mil pesos, es decir, 32 por ciento de sus ingresos, y aportan 5 por ciento en obra material; además, tienen el uso de suelo deportivo otorgado por el gobierno.
Al frente de la agrupación se encuentran, además de Traver, David Wiener, Raúl Robles y Gabriel Nasser. Encabezan a 220 socios. Traver apunta que siempre se ha dicho que es una elite la gente que practica este deporte. Pero, hablando de dinero, "Ƒcuánto es mucho? ƑPara quién? Y, Ƒde qué manera?" En muchas ocasiones se trata de la defensa de una tradición familiar, precisa.
Por su ubicación privilegiada, en el Centro Hípico no hay lugar disponible para un caballo más. Por cada equino se cobran alrededor de 3 mil 500 pesos, más un depósito por caballeriza de 6 mil pesos, y gastos extra. Es un poco más caro que otros clubes, pero, según algunos socios que no quisieron dar su nombre, no se conocen en detalle las finanzas. "Es falso", replica Traver, quien pide saber el nombre de aquellos.
El delegado Aus den Ruthen señala que es necesario poner fin al permiso -lo cual posibilita la ley-, como lo pidió desde el año pasado, pues ahí se da un uso privado de un bien público. Definitivamente en abril del año pasado se perdió la oportunidad de recuperar el espacio, apunta Fernando Aboitiz, director de Desarrollo Social en Miguel Hidalgo, pues la Oficialía Mayor del GDF tuvo "fallas de técnica legal" para revocar el permiso.
Así fue. "Nos negaron el derecho de audiencia" y por eso procedió el amparo, confirma Traver, quien asegura que hay diferencias con la delegación pero no con dependencias de la jefatura de Gobierno. Aunque existen por lo menos 70 clubes hípicos, éste de la tercera sección de Chapultepec seguirá funcionando como hasta ahora, aseguró.