Hodoyán Palacios ejecutó a un comandante y a dos agentes de la Policía Judicial

Cincuenta años de prisión a sicario del cártel de Tijuana; en BC arrestan a dos presuntos capos

GUSTAVO CASTILLO Y JORGE ALBERTO CORNEJO REPORTERO Y CORRESPONSAL

El juzgado primero de distrito B en materia de procesos penales con sede en Toluca, estado de México, sentenció a 50 años de prisión a Alfredo Miguel Hodoyán Palacios, El Lobo, por su responsabilidad en los asesinatos del comandante de la extinta Policía Judicial Federal, Ernesto Ibarra Santés, y de los agentes Israel Moreno Flores y Juan Aarón Rosas Gallegos, así como del taxista Juan Arturo Hernández Lizardi, quienes fueron ejecutados el 14 de septiembre de 1996 en la ciudad de México.

La Procuraduría General de la República (PGR) informó que Hodoyán Palacios, uno de los principales sicarios del cártel de los hermanos Arellano Félix, fue condenado a más de 176 años de prisión y a pagar una multa de 17 mil 664 y 17 mil 854 pesos por concepto de reparación de daños, pero como el Código Penal con el que se le juzgó no permitía más de 50 años como pena máxima, esta última fue la que le decretó el juzgado.

Hodoyán Palacios formaba parte del grupo conocido como narcojuniors, que era el brazo ejecutor de la organización criminal de los hermanos Arellano Félix y que estaba integrado, en su mayoría, por jóvenes del barrio Logan, con sede en California, Estados Unidos.

Además, esta sentencia se suma a las dictadas a los copartícipes en el homicidio de Ibarra Santés; ellos son Francisco Cabrera Castro, El Piedra, y Gerardo Cruz Pacheco, El Capitán.

En tanto, en Tijuana, Baja California, la Procuraduría General de Justicia del estado detuvo a dos presuntos colaboradores del cártel de los Arellano Félix, quienes fueron entregados a las autoridades federales y enviados a la capital mexicana.

La dependencia indicó que el pasado 18 septiembre fueron arrestados Alberto Pacheco González y Julio César Moreno Cosme, quienes participaron directamente en el secuestro de Francisco Javier Sánchez Lugo e Inés Rodríguez Ibarra, propietario y gerente de Farmacias Genéricos, respectivamente, en hechos ocurridos el pasado agosto.

Los detenidos también están relacionados con diversas averiguaciones previas que se encuentran actualmente en integración. La detención se pudo realizar durante un operativo llevado acabo por elementos de la Policía Ministerial en un fraccionamiento ubicado al sur de Mexicali.