''Los personajes de las cintas, en especial las de EU, carecen de profundidad''
El buen ladrón, de Neil Jordan, cosecha aplausos al abrir el Festival de San Sebastián
Kusturica participa en el remake del director irlandés al clásico de Jean Pierre Melville
La violencia no se la deseo a ninguna cultura o país, dijo el autor de Juego de lágrimas
MERRY MAC MASTERS ENVIADA
San Sebastian, 19 de septiembre. Las andanzas del carismático jugador y truhán Bob Montagnet (Nick Nolte) animaron la mañana en el inicio hoy del Festival Internacional de Cine de San Sebastián. Como resultado, el filme negro, pero con final benigno, intitulado El buen ladrón (The good thief), del director irlandés Neil Jordan, recibió aplausos al término de su proyección en la apertura de la sección oficial de la competencia por la Concha de Oro.
Momentos después, Jordan habló de sus razones para hacer un remake de Bob el jugador, cinta de Jean Pierre Melville. Aparte de que se lo propusieron, para el director de Juego de lágrimas (1992) realizar otra versión de un ''clásico" lo obligaba a proponer ''algo interesante, en vez de sólo contar de nuevo la historia''. A la par de la película original toma lugar otra trama relacionada con las ''falsedades" en general: un robo real y otro tan falso como los cuadros de Picasso, Cezanne, Modigliani y Van Gogh que aparecen en el largometraje.
De Nick Nolte, protagonista del filme, Jordan comentó: ''Los personajes en las películas, en especial las estadunidenses, se han vuelto muy blandos. Nunca hay profundidad, ni luz ni sombra. Suele ocurrir que carecen de problemas personales. Al desarrollar el guión me fui enamorando de la personalidad de Bob, quien resultó tener su propio lenguaje y sus obsesiones: el juego, las matemáticas, la probabilidad, la estética. Era un personaje inteligente, pero también un embustero y un delincuente".
Rodar El buen ladrón sólo fue posible cuando Jordan encontró al actor indicado quien resultó ser el estadunidense Nick Nolte, al que buscó en San Francisco, California, y a quien el papel le quedó ''como guante". A su vez, el actor Tchéky Karyo, que interpreta al detective Roger, describió a Nolte como una persona ''abierta, curiosa, provocadora e irónica. Trabajar con él fue como un jamming (sesión de improvisación) en la música".
El papel de Emir Kusturica
El buen ladrón cuenta con la presencia del director Emir Kusturica -''dueño de una cualidad magnética y una confianza que suelen tener los que no son actores", aseguró Jordan- y recurre a escenas ''congeladas" en ciertos puntos de la trama como en el síndrome de abstinencia de un drogadicto. Al final, ese efecto se elimina en la medida en que la suerte regresa a la vida de ese ''perdedor".
A pregunta expresa, Jordan dijo no estar en posición de expresar una opinión acerca la circunstancia actual del País Vasco, pero señaló: ''He hecho tres o cuatro cintas acerca de la violencia política en Irlanda, debido a que durante una etapa de 25 años fue un hecho de la vida de ese país; ahora ya no lo es, lo cual me da mucho gusto. En este momento no siento necesidad de hacer más cintas sobre ese asunto. Fue una etapa muy difícil y no se la deseo a ninguna otra cultura o país".
