Dos enviados del sindicato fueron agredidos por disidentes en el centro de Morelia
Condenan IP y gobierno vejación a mentores del SNTE
Afectados levantan denuncia penal; "fue un exceso", admite uno de los responsables del acto
ERNESTO MARTINEZ ELORRIAGA CORRESPONSAL
Morelia, Mich., 18 de septiembre. María Sanjuana Cerda Franco y Lucino Soriano Contreras, enviados del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) para organizar la elección para renovar la dirigencia seccional en Michoacán, presentaron hoy en la Procuraduría de Justicia del Estado una denuncia penal por los delitos de amenazas, privación ilegal de la libertad, lesiones, asociación delictuosa, robo calificado y lo que resulte contra un grupo de profesores que atentaron contra su integridad física la noche del martes.
La denuncia se turnó contra los profesores Feliciano Romero, Gustavo Delgado, Adán Pérez, Sergio Espinal, Guadalupe Espinal, Graciela Sansón, Wenceslao Cultero, Rubén Zavala, Agusín Lara, Georgina Cervantes, Mario Escobar y Joge Granados, entre otros. Todos ellos sacaron a la fuerza a Cerda Franco de una televisora local, donde concedía una entrevista, y después, junto con Soriano Contreras, la llevaron a la puerta principal del palacio de gobierno, donde le cortaron parte del cabello y la embarraron de huevo, mientras a su acompañante le quitaron la camisa, lo llenaron de huevo y le pegaron calcomanías en la espalda.
Juan Pérez Medina (el dirigente de la sección 18 del SNTE desconocido hace dos años por el CEN, quien también participó en la agresión) aseguró que los hechos fueron resultado de una provocación de la líder moral del SNTE, Elba Esther Gordillo, quien trató de imponer una elección aparentemente limpia para la renovación de la sección sindical. Anunció que emprenderá un juicio político contra Cerda Franco.
Después de participar en una pequeña marcha en el centro histórico de la ciudad, Pérez Medina admitió este miércoles que fue un exceso lo que hicieron con los representantes del SNTE.
Por su parte, el gobierno del estado publicó un comunicado en los diarios locales en el que condena enérgicamente la vejación de que fueron objeto los delegados del sindicato nacional de maestros. "Es nuestra obligación constitucional preservar el estado de derecho y garantizar la libre expresión de las ideas, así como la seguridad y la integridad física de las personas y sus bienes", advierte.
Reiteró su respeto a la vida interna del gremio e hizo un llamado a los profesores para que diriman sus diferencias dentro de la ley y mediante el diálogo civilizado.
Por su parte, los empresarios locales condenaron el hecho y exigieron a las autoridades la aplicación de la ley, ya que, señalaron, no se puede permitir que se transgreda de esa forma, pues los maestros atentaron contra un medio de comunicación y secuestraron a dos personas, quienes además fueron vejadas públicamente.