La visión del gobierno es "tercermundista", sostiene

La ciencia, estancada por falta de apoyos: De la Peña

La parálisis económica afecta gravemente al sector

KARINA AVILES

El presidente de la Academia Mexicana de Ciencias (AMC), José Antonio de la Peña, afirmó que esta disciplina está en una fase de "estancamiento" debido a la carencia de apoyos económicos, hecho que ya "ha golpeado fuertemente" al sector en algunos aspectos, pues este año hay un "crecimiento cero" en el número de plazas de investigadores y en el caso de alumnos que estudian matemáticas, física, química y biología, "no suman ni 3 por ciento" de la matrícula de educación superior.

En entrevista, el científico expresó que el gobierno mexicano tiene una mentalidad "muy tercermundista" respecto de la ciencia y la tecnología, que la iniciativa privada lleva a la práctica bajo el esquema de país maquilador, consistente en no hacer innovaciones propias, importar tecnología y utilizar mano de obra barata.

Si se prolonga la "parálisis" económica, agregó, las implicaciones para el sistema científico nacional serán aún más graves debido a que habrá fuga de cerebros, se presentará un mayor envejecimiento de la planta académica, los investigadores mexicanos prolongarán sus estancias en el extranjero y se cancelarán proyectos de investigación.

De la Peña llamó la atención sobre las graves consecuencias que representa el hecho de que "el crecimiento en el número de plazas de investigadores ha sido de cero en varias universidades", porque esto tiene importantes repercusiones, una de ellas es en la matrícula de las carreras científicas.

"Cuando la gente joven percibe que no hay futuro al estudiar una licenciatura del área de ciencias opta por estudiar una carrera de otro tipo". Prueba de esto es que los estudiantes de matemáticas, física, química y biología no suman ni 3 por ciento de la matrícula en educación superior, mientras que los de las carreras de administración y contaduría representan 27 por ciento.

Aseguró que "ya existe una crisis de las carreras científicas" y podría agudizarse si continúa la carencia de apoyos. Las plazas en las universidades significan una de las principales fuentes de empleo para los investigadores mexicanos, de manera que si continúa el cierre de plazas, "en un par de años la situación será irreversible".

Recordó que entre 1984 y 1989, cuando el país estaba sumido en una fuerte crisis económica, la matrícula de las carreras científicas cayó 50 por ciento, y aunque "se ha levantado un poco", el hecho es que este tipo de licenciaturas atraen a una mínima cantidad de estudiantes.

Al preguntarle qué pasaría en el planeta si se extinguieran los matemáticos, los físicos o los biólogos, De la Peña expresó que "lo que se conoce como mundo moderno se iría deteriorando al grado de regresar a una vida primitiva. La conservación del medio ambiente, la utilización de recursos como el agua, la energía y todo lo que rodea al ser humano sufriría un deterioro muy grave y rápido".

Insistió en que "el gobierno no debe suponer que primero vamos a salir de pobres y luego se hará ciencia en el país". La educación y el sistema científico deben ser apoyados "a pesar de que haya crisis", porque son motores del desarrollo.

Manifestó que en su discurso, el gobierno federal declara que la ciencia y la tecnología son prioritarias, pero los hechos demuestran lo contrario. Para el aparato gubernamental son áreas "superfluas o que pueden omitirse fácilmente".

Sumado a lo anterior, dijo, la iniciativa privada mantiene una visión "muy atrasada" sobre la importancia de este sector, debido a que no promueve la modernización tecnológica y las innovaciones propias. Se apostó a un esquema maquilador con la desventaja de que ahora hasta esas industrias se están yendo del país, agregó. Las maquiladoras no realizan innovaciones, pero un grupo de empresarios declaró recientemente que México necesita técnicos, no gente con nivel de licenciatura, cuestionó.

Por último, José Antonio de la Peña adelantó que la AMC realizará una labor intensa de cabildeo para lograr un aumento presupuestal significativo en las áreas científica y tecnológica.