Colectiva en memoria de los caídos el
11 de septiembre
Nunca más ''convierte el dolor en imagen'',
dijo Emilio Payán
Edmundo Font e Irma Bohórquez, entre los expositores
MERRY MAC MASTERS
A la usanza asiática, Nunca más,
colectiva en memoria de los muertos por los atentados del 11 de septiembre
fue bendecida con fuego durante su apertura en la Librería Gandhi.
Un par de lamas tibetanos cantaron, rezaron y comenzaron a encender las
tres hileras de pequeñas velas blancas, dispuestas en un objeto
de fierro diseñado para la ocasión por el escultor Eduardo
Núñez -también hizo un par de torres desmontables-,
expositor junto con el poeta Edmundo Font, el pintor Emilio Payán,
la fotógrafa Irma Bohórquez y Roberto Treviño, siquiatra
de profesión que presenta monotipos. En seguida, el público
fue invitado a continuar con el acto en esa noche lluviosa.
Font,
organizador de Nunca más, manifestó que es una manera
de estar cerca de las víctimas de aquella tragedia que fue un parteaguas
en la historia.
Conmemoración por la paz
Mauricio Achar, fundador de Librería Gandhi, que
no suele presentar exposiciones, dijo que le había gustado mucho
la propuesta de Font.
Por el nombre de la librería, ''veo esto como una
conmemoración por la paz, para que nunca más vuelva a pasar,
porque al final de cuentas murieron personas de 86 nacionalidades. Creo
que Gandhi hubiera estado de acuerdo con esto". Achar agregó: ''Vamos
a estar mucho más abiertos a este tipo de actos".
De la televisión a la pintura
Dentro de la obra que exhibe Emilio Payán hay un
cuadro que empezó el mismo día de los ataques terroristas:
''Fue una imagen televisiva muy fuerte para mí.
Por eso de inmediato me puse a pintar las torres gemelas. Si los periodistas
y los escritores tratan el 11 de septiembre, los pintores también
tenemos que sacar las cosas. Empecé a trabajar el tema de los edificios
a raíz de un viaje a Nueva York. Ahora, me concentré más
en el tema de las torres y los aviones."
Aparte de los acrílicos, Payán hizo una
pequeña escultura en plata de las torres y otra como arte-objeto.
Para el también impresor la exposición colectiva es un espacio
en el que ''el dolor se convierte en imagen".
Para Edmundo Font, quien es poeta, es la primera vez que
hace una obra plástica. Su idea era utilizar sobre todo cemento
armado sobre una malla. Para sus cajas trabajadas a modo de collage,
contó con la asesoría del maestro de obras Chuy, quien
le enseñó a elaborar sus mezclas en las que combinó
tableros de computadoras destrozadas, tablas de madera, palas, niveles
utilizados en la construcción, láminas y vidrios, es decir,
''elementos que tienen que ver con la deconstrucción de lo que significarían
las torres".