MEXICO, S.A.
Carlos Fernández-Vega
Se truncaron esperanzas para gobiernos satélites
de EU
Economía en arenas movedizas
MAS ALLA DE LOS ACTOS conmemorativos del primer
aniversario de los atentados del 11 de septiembre de 2001 y de las emotivas
palabras en ellos pronunciadas, las del presidente Bush incluidas, los
nerviosos mercados internacionales y sus fuerzas vivas no recibieron mayor
aliciente, ni mucho menos el mensaje que verdaderamente esperaban, es decir,
el relativo a que la economía estadunidense, por fin, recuperaba
la senda del crecimiento sostenido, una vez superados los negativos efectos
de aquellos ataques.
NO FUE ASI. POR EL contrario, el gobierno de Estados
Unidos arrojó -por enésima ocasión en el pasado bienio-
un balde de agua fría sobre los sacrosantos mercados, tras divulgarse
el contenido del llamado Libro beige elaborado por el Banco de la
Reserva Federal (Fed) de aquel país, en el que se subraya que la
economía más poderosa del planeta se desaceleró en
las semanas recientes, mostrando un comportamiento irregular.
LA
ESPERANZA DE decenas de gobiernos satélite -el del cambio incluido-
que giran en torno de las bondades de Estados Unidos, que ayer no sólo
conmemoró el primer aniversario de un cruento ataque que causó
miles de víctimas civiles, sino el de una de las más penosas
humillaciones para su gobierno, parece quedar trunca una vez más
al conocerse el informe de la Fed, toda vez que en el destino de su poderoso
"aliado" han fincado tanto el futuro de sus debilitadas y dependientes
economías, como la "solidez" de sus respectivos proyectos políticos.
EL LIBRO BEIGE, UN
primer balance sobre las condiciones económicas imperantes en Estados
Unidos, que contiene información hasta el pasado 3 de septiembre,
entre otros aspectos señala que la mayoría de las regiones
productivas del país reportaron un crecimiento lento e irregular,
con experiencias mixtas o aisladas en todos los sectores de la economía,
un desempeño irregular entre los minoristas a finales de julio y
agosto, una actividad manufacturera lenta y un escaso o nulo aumento en
el empleo. Sólo tres de ellas registraron una mayor demanda en este
último renglón, aunque de trabajadores temporales.
EL LIBRO BEIGE SERA
fundamento para que la Reserva Federal, en su próxima reunión
del 24 de septiembre, tome decisiones en torno al futuro inmediato de las
tasas de interés que fija para el mercado doméstico y que,
desde luego, repercuten en los principales mercados financieros internacionales.
De acuerdo con un reporte de la agencia Reuters, la mayoría de los
analistas considera que la Fed no alterará la proporción
imperante en dichos indicadores, toda vez que reporta su más bajo
nivel desde 1962, tras haberlos recortado en 11 ocasiones el año
pasado, con el propósito de estimular el crecimiento de una economía
que se mantiene en el hoyo.
SIN EMBARGO, ALAN Greenspan, presidente de la Reserva
Federal de Estados Unidos, comparecerá esta mañana ante la
Comisión de Presupuesto de la Cámara de Representantes, para
tratar de convencer a propios y extraños que a pesar de las serias
complicaciones que reporta la economía de su país -y, por
tanto, de muchas otras naciones satélite-, el camino de la recuperación
está "a la vuelta de la esquina", tal como lo ha venido diciendo
el gobierno estadunidense desde hace un par de años, especie que
a la fecha no tiene elementos de confirmación. Aun así, el
gurú de las finanzas globalizadas hará su mejor esfuerzo,
justo en el momento en el que el presidente Bush abra fuego -a nivel retórico,
hasta el momento- en contra de Irak en la sede de la Organización
de las Naciones Unidas.
LA PRESENCIA DE BUSH en la ONU y la eventual formalización
de la campaña militar contra Irak concentrarán la atención
de todo el mundo, pero muchos analistas financieros, de acuerdo con Reuters,
piensan que, igualmente, el discurso del presidente estadunidense no podrá
opacar la comparecencia de Greenspan ante la Cámara de Representantes.
La mayor economía mundial salió de la recesión de
2001, pero una serie de escándalos corporativos, nuevas amenazas
de atentados y dudas sobre lo que ocurrirá con una nueva cruzada
contra el régimen de Hussein, han provocado que Wall Street y el
común de la gente estén preocupados por la posibilidad de
que la economía vuelva a caer en una recesión.
NO POCOS ESPECIALISTAS consideran que el horno
no está para bollos: "La economía está en medio de
arenas movedizas; las empresas y los consumidores han perdido la fe en
que la recuperación económica se afiance", de acuerdo con
Anthony Chan, economista jefe de Bank One Investment Advisors, en Columbus,
mientras el economista jefe de Standard and Poor's en Nueva York, David
Wyss, anotó que "todavía la recuperación enfrenta
peligros", como el hecho de que aunque la tasa de desempleo en Estados
Unidos cayó el mes pasado a un mínimo en cinco meses, la
economía sólo generó 39 mil empleos, un número
que se vio impulsado por las contrataciones de empleados públicos
para tareas de seguridad en los aeropuertos. "La economía sigue
muy vulnerable a cualquier cosa que pueda salir mal".
MAS ALLA DE LA EMOTIVIDAD mostrada en los actos
conmemorativos por el primer aniversario de los atentados, el anterior
es el aire que se respira en Estados Unidos y los principales centros financieros
internacionales. Todos en espera de la comparecencia de Greenspan y sus
eventuales buenas noticias.
MIENTRAS SE CONOCE LA línea que marcará
el gurú, en México el Instituto Nacional de Estadística,
Geografía e Informática dio a conocer que la producción
industrial en el país se incrementó 1.9 por ciento durante
el séptimo mes del año con respecto a igual lapso de 2001,
una proporción que superó las estimaciones previas (1.22
por ciento). En el avance del indicador global incidieron el alza en la
industria manufacturera (1.7 por ciento) y el incremento de 6.1 por ciento
en la generación de electricidad, gas y agua, así como el
2 por ciento positivo en el sector de la construcción. En cifras
desestacionalizadas, la producción industrial creció sólo
0.02 por ciento en julio respecto a junio.
Las rebanadas del pastel:
¿ALGUIEN CREE QUE LA llamada telefónica
de Bush a Fox fue para "consultar" al mandatario mexicano sobre una eventual
guerra santa de Estados Unidos contra Irak?... Los que saben de
esto aseguran que la comunicación fue para "sugerir" que Pemex llene
el tanque de gasolina del aparato militar de los amigous del norte.