La delegación que asistirá a la interparlamentaria debe dejar atrás las posturas políticas
Castañeda enrarece cada vez más el ambiente con Cuba; la visión de Fox es distinta: Corral
ANDREA BECERRIL
La delegación mexicana que asistirá a la Reunión Interparlamentaria México-Cuba está obligada a dejar atrás posturas partidistas y asumirse como la representación del Congreso que deberá ayudar a distender un ambiente "que se enrarece cada vez más" por la actuación del canciller Jorge Castañeda, consideró el senador del PAN, Javier Corral Jurado.
Sostuvo incluso que la visión del presidente Fox en torno a Cuba es distinta a la que tiene el titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores, toda vez que el Ejecutivo federal "no lleva sus sentimientos a la política con otras naciones".
El legislador panista resaltó lo delicado de la situación, ya que, dijo, en el momento en que el Congreso de la Unión decidió llevar a cabo en La Habana la quinta Reunión Interparlamentaria México-Cuba "la cancillería incrementa las medidas de tensión al recrudecer las prohibiciones al embajador Ricardo Pascoe Pierce para que organice las fiestas de Independencia en la isla".
Pero no sólo ello, agregó, el canciller Castañeda prohibió al embajador incluso asistir a las conmemoraciones del 15 de septiembre que otras instituciones o personas pudieran organizar y financiar en Cuba. La situación es complicada, agregó, luego de las acusaciones sobre malos manejos financieros en la representación diplomática, que la propia Secretaría de la Contraloría y Desarrollo Administrativo (Secodam) y Pascoe Pierce aclararon.
En ese sentido, el senador chihuahuense -a quien algunos legisladores y legisladoras de la bancada panista trataron de vetar para que no asistiera a la interparlamentaria, por considerar que tiene una postura procubana- dijo que es importante que la delegación mexicana se entreviste, en cuanto llegue a La Habana, con el embajador Pascoe Pierce, para que les dé un diagnóstico de lo que está ocurriendo y de propia voz les exponga todo lo relativo a los hechos en que se ha visto envuelto a partir de la prohibición de celebrar las fiestas patrias mexicanas en la isla gobernada por Fidel Castro.
La interparlamentaria, insistió, será el primer encuentro entre uno de los poderes del Estado mexicano con otro poder en Cuba, después del incidente de la cumbre de Monterrey entre los presidentes Fox y Castro. "Tiene entonces una relevancia fundamental, porque sin sustituir al gobierno de la República, el Congreso puede y debe contribuir a distender el ambiente, sobre todo en momentos en que se enrarece más, como consecuencia de la actuación de la cancillería".
Diferenciación entre Fox y Castañeda
En ese contexto, el legislador rechazó la posibilidad de que Castañeda tratara de incidir entre los integrantes de la delegación mexicana para hacer fracasar la interparlamentaria. "Dudo que al canciller se le vaya a ocurrir tratar de influir en esta delegación", agregó, e hizo notar que en forma alguna podrían ponerse a las órdenes de una visión y de una posición en la que incluso "identifico una gran diferencia entre Fox y Castañeda".
Sostengo, recalcó, "que en el caso cubano una es la visión del Presidente de la República y otra la de Castañeda".
-ƑPor qué entonces el Presidente le permite a su canciller deteriorar la relación con Cuba?
-Hay muchas cosas que no nos explicamos. Creo que Fox a veces delega y delega de más, pero en muchos ámbitos, no sólo en lo que se refiere a relaciones internacionales. Yo puedo asegurar que en forma alguna el Presidente de la República está molesto porque se va a realizar un encuentro de legisladores mexicanos con cubanos. En principio, porque el Ejecutivo federal no lleva sus sentimientos personales a la política y porque su responsabilidad como jefe de Estado es la relación institucional con todas las naciones.
-ƑHabría que decirle a Fox que su canciller quiere acabar con la relación entre los pueblos mexicano y cubano?
-Eso se lo dice La Jornada todos los días -contesta y suelta la carcajada.
Después, Corral Jurado accede a hablar sobre la disputa interna que se dio en la fracción del PAN en el Senado, por el intento de algunos de sus compañeros de bancada de impedir que asistiera a la interparlamentaria. Aclara, de entrada, que fueron muy pocos los que trataron de vetarlo, con el argumento de que es procubano.
"Quizás ese calificativo es acertadísimo, porque durante mucho tiempo me ha interesado ahondar en la relación México-Cuba, pero entiendo que quienes hacen esa afirmación pretenden llevarme al terreno del procastrismo, y no es así. Tengo preocupaciones muy claras frente al régimen de Fidel Castro, en lo que se refiere a democracia y derechos humanos, pero lo enfrento de manera distinta, sin descalificaciones".
Corral Jurado explicó que el problema surge cuando se disocian los derechos individuales de los sociales y no se pone en la balanza todo lo relativo a salud, educación, garantías fundamentales, que son también derechos humanos.
No sólo en el caso de los senadores y diputados del PAN, sino también de los integrantes de los demás partidos que conforman la delegación a la quinta Reunión Interparlamentaria México-Cuba, lo fundamental es "entender que ese encuentro puede ser un buen puente para el reinicio de las relaciones México-Cuba".