Clausuran simbólicamente la sede del Instituto Mexicano del Seguro Social

Piden jubilados plan de "rescate" a las pensiones

Su pliego petitorio quedó en la recepción del instituto; la mayoría percibe mil 300 pesos al mes

FABIOLA MARTINEZ

Pocos de ellos saben el origen partidista de su dirigente y desconocen los procesos legislativos que tendrían que avanzar para que alcancen una pensión universal, pero de lo que están ciertos es que tienen que salir diario a la calle "a buscar unos pesos" que les permitan sobrevivir.

Son adultos mayores que, en el mejor de los casos, perciben pensiones de mil 300 pesos al mes, por lo que han decidido luchar por mejores condiciones de vida "hasta el último día de su existencia... hasta el día en que estiremos la pata".

Un grupo de unas 200 personas clausuraron simbólicamente ayer la sede del Instituto Mexicano del Seguro Social en Paseo de la Reforma, para exigir -por tercera ocasión en este año- pensión universal para todos los viejos del país y que se otorgue una jubilación a quienes les faltó un lapso corto para cumplir el plazo legal de retiro.

El acto fue encabezado por el diputado perredista Emilio Serrano Jiménez, integrante de la comisión de atención a la tercera edad de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal.

Los adultos mayores, como se les llama ahora a quienes rebasaron los 60 años de edad, forman parte del grupo denominado Revolución Blanca, el cual arengó como consigna el grito de ¡justicia, justicia!

Como siempre, su pliego petitorio quedó en la recepción del inmueble y, como en otras ocasiones, sólo engrosará la lista de oficialía de partes. Por lo pronto, los viejos siguen inmersos en la pobreza en calidad de jubilados y ahora, por necesidad apremiante, vendedores ambulantes de todo lo que se puede.

"Al pie del cañón"

Abelina Rosales García, de 82 años de edad, es una de las que hizo todo lo posible por hacer sonar su voz en el mitin. "Al pie del cañón -dice-, en lucha, para que le den a mi esposo una mejor pensión, porque después de trabajar 32 años en la delegación Cuauhtémoc recibe mil 500 pesos al mes".

No alcanza, expresa esta mujer pequeña de estatura quien porta una casaca con la leyenda Revolución Blanca. Furiosa, agita su puño para gritar que ¡al gobierno nunca le alcanza el dinero para ayudar a los pobres!

Sus compañeras se quejan también de que en el IMSS e ISSSTE, de manera frecuente, escasean las medicinas. "De qué sirve que el doctor, con muy buen modo, nos recete medicinas que no hay en la farmacia del instituto...de qué sirve que nos recete buenos alimentos si no hay con qué comprarlos".

Otra señora muestra sus recibo de pago en el que aparecen, expresa, sus "mil 282 mugrosos pesos" mensuales por toda una vida de trabajo, "y para acabarla de amolar tenemos que acudir a un ISSSTE que está de la patada, no es justo".

Su dirigente, a quien ubican como el "licenciado" o el "señor diputado" repite su discurso para que el gobierno federal aplique un "rescate" a las pensiones de miles de ancianos, de la misma forma en que se destinaron recursos millonarios para el rescate de los bancos, carreteras o ingenios.

Una vez más, los ancianos lo respaldan con arengas, aplausos y reclamos de ¡justicia, justicia, justicia!, y el oficio REF.CATEJP/955/02 del "licenciado" y "señor diputado" directo a la oficialía de partes del IMSS.