Juan Torres, licenciado en enfermería y asistente contable, se sabe portador del VIH desde hace 6 años. A los 29 años de edad, ha dejado de laborar por motivos de salud relacionados con el sida. No obstante, seguía recibiendo tratamiento por parte del IMSS, gracias a las prórrogas otorgadas a los derechohabientes con VIH/sida. Pero la actual administración del Seguro Social, encabezada por Santiago Levy, ha decidido suspender dichas prórrogas, debido, argumentan, a su crisis financiera, con lo que han afectado a cientos de pacientes con VIH/sida, Juan es uno de ellos. El activista yucateco del Frente Nacional de Personas Afectadas por el VIH/sida expone su experiencia a Letra S a manera de denuncia y solidaridad con las personas afectadas por la medida.

"Me enteré que era VIH positivo el 2 de mayo de 1997. No obstante, mi salud se ha mantenido estable desde que recibo los medicamentos antirretrovirales por parte del Seguro Social. Pero desde principios de julio de este año, me enteré que ya no me los van a seguir suministrando. A las personas que no tenemos trabajo y que por motivos de enfermedades crónicas, continuábamos recibiendo la atención médica y los medicamentos necesarios para poder vivir, nos suspendieron la seguridad social. Las autoridades de salud saben perfectamente que con seis u ocho días que dejemos de tomar los tratamientos, el virus presente en nuestro organismo desarrolla resistencias a los medicamentos, y aunque posteriormente retomemos la terapia, los fármacos ya no nos harán efecto. Mi organismo, como el de centenares de personas con VIH/sida de diferentes regiones del país, ya desarrolló resistencias. Por eso digo que es una acción genocida del IMSS el dejarnos sin medicamentos.

"Con esas acciones del ´gobierno del cambio´ todos salimos perdiendo: a los enfermos nos están mandando a la muerte; el gobierno, por su parte, está desperdiciando los recursos invertidos en nuestra salud; y, desde luego, el pueblo de México está siendo defraudado al ver cómo el gobierno derrocha el dinero que recauda vía impuestos para salvar carreteras y bancos y no vidas humanas. Esa decisión ha sido tomada a la ligera. Las personas que estamos siendo afectadas hemos aportando nuestro trabajo al crecimiento del país, y hemos pagando impuestos. Con esta acción, la administración federal está violando nuestros derechos humanos.

"Es muy ambigua la postura del presidente Fox al indignarse por la muerte de un conacional en Texas, mientras que aquí en México nos están condenando a una muerte lenta y segura a quienes hemos sido desincorporados del IMSS.

"El VIH es una enfermedad crónica y tratable con atención médica integral. Creo que si el gobierno actual fuera congruente con lo que pregona en sus costosas campañas publicitarias, quienes vivimos con VIH podríamos acceder realmente a la salud y no seríamos discriminados en ningún ámbito."