viernes 23 de agosto de
2002 |
n Limitadas, las acciones de la Semarnat en la entidad, dijo |
Acepta MMF haber sido "demasiado complaciente" frente a la tala clandestina |
q Criticó a quienes se dicen defensores de leñadores y carboneros pobres |
Jorge Machuca Luna n |
El gobernador del estado,
Melquiades Morales, aceptó que los problemas de tala
clandestina en La Malinche se deben a que su administración
ha sido "demasiado complaciente" y no ha podido
ofrecer alternativas a los leñadores y carboneros de las
inmediaciones de San Miguel Canoa. Asimismo, criticó a los particulares y organizaciones que se ostentan como "dizque defensores" de leñadores y carboneros; es preferible, dijo, que esas personas defiendan verdaderamente los recursos naturales y la ecología. También reconoció que otro factor que propicia la tala en la entidad son las "lagunas" existentes de la ley forestal federal y la limitada labor de los 10 inspectores de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) que laboran en la entidad. En conferencia de prensa realizada en el marco de la gira del titular del Ejecutivo por Huauchinango, éste apuntó que la operación de una agencia del Ministerio Público especializada en delitos forestales forma parte de las labores que su gobierno realiza para paliar las carencias de las normas ambientales. Incluso, añadió, cualquier ciudadano puede presentar denuncias de tala furtiva de manera anónima ante la propia oficina del gobernador con la garantía de que todas serán indagadas. En diferentes ocasiones, Melquiades Morales Flores urgió a los ciudadanos a participar en el combate al corte ilegal de árboles, "no habrá tregua; o son los intereses de Puebla, o los de unos cuantos". Al abundar en el caso de los leñadores de San Miguel Canoa, Morales Flores sostuvo que no permitirá que los grandes cortadores y traficantes de madera se amparen en permisos que son otorgados a los leñadores de bajos recursos económicos. Este año, el gobierno estatal ha clausurado 19 aserraderos clandestinos, "estamos llegando al fondo", dijo. Una medida para no permitir la sobreexplotación forestal, continuó el gobernante, es colocar códigos de barras en la madera cortada previa autorización; "antes, una guía para 500 metros cúbicos de madera servía para sacar 4 mil metros de troncos; las cosas han cambiado". Cuando se le preguntó acerca de la relación entre el corte de la madera y la subsistencia de los leñadores más pobres de Canoa, insistió en que la parte oficial de manera permanente ofrece alternativas para garantizar su subsistencia, como los programas de empleo temporal. |